Diferentes sindicatos de transporte (autobuses, trenes, aviones y fluviales) de Alemania, paralizaron este lunes sus actividades para exigir aumentos salariales frente a la inflación.
El gremio de transportistas aseguraron que esta medida es necesaria para impulsar sus exigencias. «Un conflicto social que no tiene repercusiones, es un conflicto social inofensivo», aseguró el presidente del sindicato Ver.di, Frank Werneke.
Esta acción que ha afectado a los residentes de 7 de los 16 estados del país, se suma a las crecientes tensiones sociales en Alemania, donde las huelgas para exigir aumentos de salarios se multiplican desde inicios de año.
Alemania paralizada
Decenas de miles de empleados del transporte aéreo y terrestre entran en huelga este lunes en todo el país
Se prevé que sea la huelga de transportes de mayor impacto en Alemania desde la década de los 90 – lis pic.twitter.com/5DF8oVwzFN
— DW Español (@dw_espanol) March 27, 2023
Exigencias
Debido al aumento de la inflación que enfrenta el país, los representantes del sindicato del sector público Ver.di, exigen un aumento salarial del 10,5% (500 euros mensuales) para los trabajadores federales y municipales.
Sin embargo, los empleadores han ofrecido un aumento de 5%, en 2 etapas y aparte de ello efectuar pagos de 2.500 euros.
Mientras que los representantes del sindicato EVG, exigen un aumento de 12%; pero las empresas solo han ofrecido un aumento de 5% en 2 partes junto con pagos únicos.
Debido a que las exigencias de los sindicatos no han sido aceptadas, estos decidieron convocar a una paralización durante 24 horas. Además, aseguraron que de no ser escuchados intensificaran sus acciones.
«Tanto el Gobierno federal como las autoridades locales han rechazado nuestro convenio colectivo. Por eso tomamos la iniciativa. Es mejor enviar una señal fuerte ahora que tener semanas de disputas laborales con las consecuencias correspondientes», dijo el líder de Ver.di, Werneke.
Cabe destacar, que esta mega huelga afectó las operaciones en la mayoría de los aeropuertos, entre ellos los principales Fráncfort y Múnich, donde se anularon los vuelos. En muchas grandes ciudades, los transportes públicos también están muy perturbados. En Berlín, la red S Bahn -un conjunto de tranvías y metros- está bloqueada.