Más de 30 tornados han azotado EE.UU. entre el sábado 11 y la madrugada del domingo 12 de Diciembre. Situación que ha afectando al menos 6 estados entre los que se encuentran: Illinois, Kentucky, Tennessee, Misuri y Arkansas, y Misisippi.
Hasta el momento, aunque se desconoce el número exacto de víctimas fatales; se estima que al menos 100 personas perdieron la vida, solo en el territorio de Kentucky. Lugar donde se desarrolló un tornado de largo recorrido que logró avanzar 360km.
Gobernador de Kentucky, Andy Beshear: Este será uno de los peores daños por tornados que hemos visto en mucho tiempo.
El gran brote de tornados del medio oeste estuvo acompañado de tormentas eléctricas constantes que dificultaron la evacuación de los habitantes de las zonas más afectadas.
Con respecto al origen de este fenómeno natural, el centro metereológico Mexicano estima que el nacimiento se debe al “marcado contraste en superficie de frío polar-ártico seco y aire cálido húmedo; en altura se encontraba la corriente en chorro con viento >250 km/h”.
En este sentido, Joe Biden, aprobó la declaración de emergencia, en un intento por apurar la ayuda federal para hacer frente a los innumerables daños materiales causados.
Joe Biden: Es una tragedia. Y todavía no sabemos cuántas vidas se perdieron y el alcance total del daño.
Viejas heridas
El nuevo desastre natural revive los acontecimientos del año 2005, cuando el huracán Katrina arrasó con New Orleans; dejando marcadas heridas en los sectores populares, abandonados a su suerte por la Casa Blanca.
Para ese entonces los fondos destinados para la reconstrucción fueron gestionados por la banca y favorecieron al sector privado; aumentando las desigualdades y la pobreza al dejar, hasta hoy, miles de familias endeudadas.
