Como para que no quede ninguna duda acerca de las vicisitudes impuestas por el bloqueo norteamericano al país, los tanqueros iraníes que vienen con un nuevo cargamento de combustible, se han visto obligados a tomar una ruta más larga y más peligrosa, para poder llegar a costas venezolanas.
El ensañamiento de los halcones norteamericanos contra Venezuela, pocas veces se había visto en la historia. Ni siquiera contra la Cuba revolucionaria se había llegado a tales excesos.
Lesa humanidad
Impedir a una nación la compra de insumos para hacer combustible, así como la gasolina ya terminada, perfectamente encaja en la categoría de crimen de lesa humanidad. Mucho más en una situación de pandemia, donde se supone que debe aflorar la solidaridad por razones humanitarias.
Pues bien, los tanqueros iraníes Forest, Faxon y Fortune que vienen cargados con 820 mil barriles de gasolina, al parecer han tenido que bordear las costas africanas por el extremo más al sur del continente madre. Esto para eludir los sistemas de geolocalización.
La travesía más larga y más peligrosa incluye sortear diversos obstáculos como algunos tramos tomados por la piratería marítima. Además, el recorrido se incrementa en varios días de duración. En condiciones normales este viaje puede consumir un mes, por la vía larga se deben adicionar por lo menos otros 10 días. Amén de los mayores riesgos.
Largo recorrido
El trayecto convencional parte desde el puerto iraní de Bandar Abbás, hasta llegar al canal de suez y luego continuar el extenso recorrido hasta el terminal de Guaraguao en Puerto La Cruz. Por la vía marítima más extensa los tanqueros deben bajar hasta bordear Ciudad del Cabo y enfilar la larga travesía hasta costas venezolanas.
De acuerdo con las últimas informaciones, estas embarcaciones iraníes ya estarían pasando cerca de las costas de Suráfrica. Por lo que se estima que podrían estar llegando al país hacia finales de este mes de septiembre.
Luego de recibido el primer cargamento de combustible iraní, el país intentó hacer una segunda transacción que, como se había negociado bajo la modalidad FOB (Free on Board), es decir que el combustible ya pertenecía a Venezuela aún dentro la embarcación de bandera iraní, fue interceptada e incautada la carga por la flota norteamericana.
El hostigamiento financiero promovido por el «gobierno» interino de Juan Guaidó ha supuesto el despojo de activos de la república como Citgo y Monómeros. Y también grandes penalidades para la población en general.
