Ante más de 40 mil personas, el famoso cantante mexicano Luis Miguel, se presentó la noche de este lunes 12 en el estadio Monumental Simón Bolívar de la Rinconada. Contra todo lo negativo y caótico que pueden vender sobre la situación que vive actualmente Venezuela, la producción de este evento superó las expectativas del «Sol de México».
El show fue un éxito rotundo e indiscutible. Nada mal para un país que está bajo un asedio y bloqueo, con casi un millar de sanciones a cuestas, con una artillería mediática enfilada y dispuesta a disparar incontables fake news que intentan deteriorar la realidad de un país que avanzó a pesar de las adversidades.
Según la periodista Madelein García, para este show en Caracas, por primera vez el equipo técnico de Luis Miguel eligió trabajar con equipos exclusivamente locales, debido a que el equipamiento que dispone Venezuela superaba las expectativas del propio artista.
La calidad y profesionalismo del venezolano no se ha ido por completo del país como insisten en decir algunos personajes de la oposición. Ahora es que sobra talento en esta nación como para recibir a grandes artistas de la talla de Luis Miguel. De hecho, en próximas fechas estarán presentándose Maluma, Karol G y otros más, lo que tumba por completo algunos estigmas del día a día de quien decidió quedarse a trabajar y apostar por su país.
Las especificaciones requeridas para la puesta en escena de un grande de la canción como el intérprete de «Cuando calienta el sol», estaba garantizada. A pesar de que 180 personas del equipo que acompaña al artista mexicano llegaron al país con más de 90 toneladas de instrumentos y materiales, no hubo contratiempos. Además que generó unos 3.500 empleos para los venezolanos.
Baja el telón
Gracias al monumental espectáculo que brindó el cantante quien ya tenía algún tiempo fuera de tarima, su actual gira y el llenazo de un estadio con estas magnitudes, calló muchas bocas de quienes no pueden explicarse cómo es posible que haya asistido tanta gente, si los medios no descansan un segundo en asegurar que en Venezuela la gente «está muriéndose de hambre».
Para nadie es un secreto que este tipo de conciertos varían el costo de sus entradas y si bien hay para todos los bolsillos, también hay precios exclusivos que solo algunos privilegiados pueden pagar. Sin embargo fue justo ese espacio VIP el que más se llenó, para aumentar el ardor de quienes critican y se confunden fácilmente desde Miami.
No se trata de si se arregló o no la situación del país, porque es absurdo pensar que por solo un concierto se solucionen los problemas que viene padeciendo el pueblo venezolano, gracias a presiones y a la injerencia de algunos gobiernos neoliberales que no respetan la autodeterminación y soberanía. Lo que debe resaltarse en estos casos es el poder de la resiliencia de toda una población que no se deja vencer y que también quiere disfrutar de buena música de vez en cuando.
Bienvenidos
Venezuela recibe con los brazos abiertos a todos los artistas que deseen venir y brindar felicidad, aunque a algunos pretendan tergiversar y manipular con este repunte de espectáculos en nuestro país.
En redes sociales las críticas a quienes asistieron quisieron opacar los fuegos artificiales y las luces láser del show de Luis Miguel. La amargura cada vez que un venezolano sonríe y la pasa bien en su tierra, solo la tienen quienes no están aquí y no se lo pueden creer.