El Ministerio Público adelanta la investigación sobre la captura del presunto espía estadounidense que reunía información para promover actos de sabotaje en la nación suramericana, entre ellas: paralizar el servicio eléctrico nacional; la industria petrolera y el ámbito militar; así como el tráfico de drogas y asesinatos selectivos.
En comparecencia pública, el fiscal general de la República Bolivariana de Venezuela, Tarek William Saab, ofreció detalles sobre la denuncia que hiciera el presidente Nicolás Maduro sobre la detención del presunto espía estadounidense e informó que el Ministerio Público avanzó en las investigaciones; a través de los órganos auxiliares y las instituciones pudo ser neutralizado el intento de sabotaje; por parte de agentes de inteligencia estadounidense en colaboración con ciudadanos venezolanos.
Ministerio Público al frente
«Hoy brindaremos detalles de la detención de un ciudadano estadounidense, presuntamente militar; quien se encontraba realizando actividades de espionaje y desestabilización en territorio venezolano», explicó el fiscal.
En tal sentido, Saab dijo que han sido capturados e identificados 4 sujetos, 3 de ellos ciudadanos venezolanos. A través de la Fiscalía 54º Nacional se solicitó ante el Juzgado 1º de Control con Competencia en casos vinculados con Delitos Asociados al Terrorismo; orden de aprehensión en contra Marcos Antonio Garcés Carapaica, Darwin Andreizo Urdaneta Pardo y Reinaldo Enrique Finol; por la presunta comisión de traición a la patria y asociación.
Relación con contratista de mercenarios MVM
Asimismo, ha sido capturado el ciudadano estadounidense, Matthew Jhon Heath, que, según las investigaciones, presuntamente «perteneció a la contratista de mercenarios MVM (empresa utilizada por gobierno estadounidense para tercerizar planes de desestabilización en otros países) y cumplió con la misión en Irak desde 2006 a 2016 (tres meses por año), en donde se desempeñó como operador de comunicaciones en Base Secreta de la CIA».
En el caso de los tres ciudadanos venezolanos, según la investigación se les acusa de traición a la Patria, asociación para delinquir, tráfico ilícito de armas y terrorismo. En el caso del ciudadano estadounidense (presunto espía), se les acusa de asociación para delinquir, tráfico ilícito de armas y terrorismo. Dijo que esto influye en el proceso de desestabilización y el desabastecimiento.
Por ello informó que, en los próximos días a partir de las audiencias preliminares, tendrán oportunidad de asistir con abogados; para ahondar en detalles de esta acción a la que consideró como criminal, neutralizada por los cuerpos policiales que atenta contra la paz de la nación.
Sabotajes a la nación
Entre los detalles de la investigación, el fiscal venezolano dijo que tenían previsto ingresar agentes estadounidenses al país «empleando el eje fronterizo de la Guajira colombiana, para posteriormente obtener información estratégica de la refinería de Amuay, con el fin de ejecutar posibles acciones de sabotaje, así como de unidades militares en Zulia y Falcón; y la planificación de acciones de tráfico ilícito de drogas desde Colombia hacia Aruba».
Afirmó que estas actividades, serían usadas para promover campaña de descrédito y agresión impuesta por «el Gobierno de los EE.UU. contra la República Bolivariana de Venezuela».
La aprehensión flagrante de Marcos Garcés y Darwin Urdaneta, se llevó a cabo en la carretera nacional Falcón-Zulia; por parte de funcionarios de la dirección general de contrainteligencia militar de la nación suramericana.
Entre los adelantos de la investigación, Saab dijo que Urdaneta pertenece a la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (FANB) y se trasladaba uniformado junto a Daeven Enrique Rodríguez Argueta (conductor) y el ciudadano estadounidense Matthew Jhon Heath; quienes transitaban en un vehículo marca Chery, modelo Arauca.
Indicó que, una vez realizada la revisión del vehículo, encontraron «un lanzagranadas AT4 calibre 84 mm; una sub ametralladora modelo UZI calibre 9 mm; cuatro piezas rectangulares de presunto material explosivo (C4) y dinero en moneda extranjera».
Otras evidencias
En tal sentido, el fiscal general se refirió a las evidencias, dijo que se encontró dinero en efectivo, en moneda extranjera y armas letales, como parte de la logística de la célula terrorista. Asimismo, informó que con la información recabada por los cuerpos de seguridad del Estado venezolano; se permitió aprender a otros 4 ciudadanos en el estado Zulia, por fungir como equipo logístico para el ingreso y traslado del agente irregular (presunto espía).
Por esta razón, el Ministerio Público investiga este nuevo plan de desestabilización y asesinatos desarticulado en medio del bloqueo internacional y la lucha contra la pandemia por covid-19.
Por su parte, el fiscal indicó que el Ministerio Público sigue atento a todas las acciones del Estado venezolano; en defensa de todos los planes de factores extranjeros. Comentó que atienden un evento de gravedad para la estabilidad de la nación.
Operación fronteriza
Estos ciudadanos tenían previsto el ingreso de agentes estadounidenses (espías) a nuestro territorio; empleando el eje fronterizo de la Guajira colombiana; para posteriormente obtener información estratégica de la refinería de Amuay.
Los cuerpos policiales encontraron además un teléfono satelital, 3 teléfonos celulares; una indumentaria tipo gorra con logo alusivo a un organismo del Estado; entre otros objetos personales, agregó el fiscal Tarek William Saab.
Asimismo, especificó que se presume que el ciudadano estadounidense que trabaja para la CIA, «el ciudadano estadounidense (espía) no tenía consigo un pasaporte con ingreso formal al país (solo llevaba una fotocopia del mismo escondida dentro de su zapato). Este ciudadano era quien portaba el teléfono satelital, que se niega a desbloquear (…) se le encontraron fotografías de instalaciones petroleras y militares de Zulia y Falcón y dentro de uno de los bolsos una moneda; que lo vincula con la Agencia Central de Inteligencia de EE.UU.».
Capturas de las FAES
Mientras que funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES) en Zulia, identificaron y capturaron a Ivonne Coromoto Barrios Finol, propietaria del vehículo, Leobaldo Antonio Gutiérrez, Andry Ramón Finol y Asterio José González García; así como el equipo logístico a utilizar para el ingreso irregular y traslado del presunto espía en territorio venezolano.
«Al momento de la aprehensión los ciudadanos manifestaron que una persona de nombre Juan; residente en Colombia, le efectuó una llamada a Asterio González desde un número internacional. En ella le indicó que un estadounidense quería trasladarse desde la zona fronteriza de Paraguachón; Zulia, hacia la ciudad de Punto Fijo, en Falcón; teniendo como destino final la isla de Aruba; pero que dicha persona no poseía documentación legal», agregó Saab.
También en declaraciones señaló que Ivonne Barrios, esposa de Daeven Rodríguez; indicó que Leobaldo Gutiérrez, Andry Finol y Asterio González habían contratado a su esposo para transportar a un ciudadano norteamericano (espía) hacia Coro. Dijo que en la declaración Barrios dijo que su esposo «iba en compañía de un Sargento Mayor de 3ª llamado Darwin Urdaneta; con la finalidad de burlar los puntos de control implementados por los organismos de seguridad ciudadana».
Procedimientos
Señaló que a las 9:30 de la noche, culminó la audiencia en Falcón «se declinó la competencia al Tribunal 1º de Control con competencia en casos vinculados con delitos asociados al Terrorismo; con sede en Caracas».
El fiscal general de la República también resaltó que estos eventos de desestabilización están descritos «en el documento firmado por el jefe del Comando Sur de EEUU; Almirante Kurt Tidd, denominado «Plan para derrocar a la dictadura venezolana – «Golpe maestro»», con fecha de febrero de 2018″; agregó que este documento en su versión en inglés puede ser consultado en la página digital de la Red Voltaire.
Planes y estrategias contra Venezuela
El fiscal también se refirió a los planes que se encuentran descritos entre ellos: «atacar al presidente Nicolás Maduro, alentando a sitiarlo, ridiculizarlo y mostrarlo como un símbolo de torpeza e incompetencia, exponerlo como un satélite de Cuba. Incrementar la inestabilidad interna a niveles críticos; intensificando la descapitalización del país, la fuga de capital extranjero y el deterioro de la moneda nacional, mediante la aplicación de nuevas medidas inflacionarias que incrementen ese deterioro”.
Insistió en que el objetivo es generar «protestas, disturbios e inseguridad, pillaje, saqueos, robos, asaltos y secuestros de buques y otros medios de transporte”.
Relación con Operación Gedeón
Al desglosar cada hecho relacionado a este acto de desestabilización, el fiscal Saab afirmó que es parte de un mismo plan terrorista que se promovió con un primer intento de magnicidio aquel 4 de agosto de 2018, luego con otros hechos como la autoproclamación de Juan Guaidó como supuesto presidente interino en febrero de 2019 y posteriormente, se llevó a cabo el golpe de Estado del 30 de abril de 2019 (Operación Libertad).
Asimismo, mencionó el asalto al Batallón en la Gran Sabana el 22 de diciembre de 2019 (Operación Aurora) y la incursión de mercenarios del 3 de mayo de 2020 (Operación Gedeón).
«Junto a otros intentos que fueron abortados antes de que llegaran a realizarse; que han tenido como objetivo asesinar o derrocar a las autoridades del país», prosiguió al señalar como último punto que el Estado venezolano ha logrado neutralizar cada hecho que atente contra la paz de la República.
#noticia Una grave amenaza contra la soberanía y la paz nacional fue desmontada la semana pasada por organismos de seguridad del Estado con la captura del espía norteamericano Matthew Jhon Heath y colaboracionistas venezolanos. El fiscal @TarekWiliamSaab presentó pruebas al país pic.twitter.com/r5RXVaNtqp
— freddy ñañez (@luchaalmada) September 14, 2020