El secretario de Estado de Estados Unidos (EEUU), Mike Pompeo, afirmó recientemente, que Rusia supuestamente se inmiscuye en los comicios del país del Norte desde 2008. A lo que el Kremlin rechazó estas acusaciones de una supuesta injerencia en los asuntos internos de los procesos electorales en la nación norteamericana.
El senador Alexei Pushkov, al frente del Comité de Política Informativa del Consejo de la Federación Rusa, fue enfático al ratificar que «Rusia no está interesada en influir de alguna forma en el proceso electoral estadounidense».
Según reseña la agencia Rusia Today, expertos consideran que la acusación de injerencia contra Rusia es resultado de la incapacidad de los demócratas en Estados Unidos de asumir su derrota en las presidenciales de 2016 y de contar con un pretexto para mantener le tensión con Moscú.
En cambio, Estados Unidos practica abiertamente lo que ellos denominan como: “injerencia con propósitos positivos” en los asuntos internos de Rusia, a través de su embajada en Moscú, organizaciones no gubernamentales y otras vías.