Venezuela asume desde este primero de junio una nueva etapa en medio de la pandemia por covid-19, con el inicio de un proceso de desescalada y la reanudación de actividades en algunos sectores de la vida cotidiana.
Al hacer los primeros anuncios en ese sentido, el presidente Nicolás Maduro se ha referido a la importancia de avanzar hacia lo que, en principio, ha denominado “normalización relativa y vigilada”, a fin de mantener las condiciones favorables que registra la nación suramericana ante la expansión mundial del coronavirus.
“Una nueva normalidad no es como la locura que yo veo o la flexibilización que hay en Europa y en Estados Unidos: la gente desesperada por ir a las discotecas, a los bares. ¿Son las discotecas o los bares la prioridad para la vida de la gente, para la normalidad?», reflexionó Nicolás Maduro recientemente en una alocución televisada.
El mandatario venezolano ha reiterado que los principales ámbitos que deben considerarse como prioritarios son aquellos que garantizan tranquilidad y seguridad de las familias: salud, servicios, ingreso y la culminación del ciclo educativo desde casa.
“Vamos a una nueva normalidad vigilada y protegida, con nuevos mecanismos donde vamos a flexibilizar actividades económicas y sociales; con cuarentena relativa y controlada. Y donde haga falta -porque surja algún foco, alguna preocupación-, cuarentena local, parcial”.
También dijo estar dispuesto a decretar toques de queda en las localidades que eventualmente lo requieran. En caso de que aparecieran brotes o focos que amenacen con el debido control de las cadenas de contagio y la curva de registro de casos por covid-19.
Desde el mes de abril, el gobierno venezolano se prepara para esta nueva etapa, que contempla evaluar por regiones el rango de control que ha logrado sobre la pandemia. Ha dejado claro que no se trata de un levantamiento de la cuarentena, sino de un proceso progresivo de flexibilización por sectores, actividades y localidades, bajo las mismas medidas de seguridad sanitarias ya aplicadas.
Guardia en alto
A mediados de mayo, el mandatario venezolano hizo un llamado a la conciencia a dirigentes políticos y a la población en general, sobre los peligros que representa el relajamiento deliberado de la cuarentena.
“Me di cuenta por transmisiones de televisión y noticieros, que había un relajamiento por parte de jefes políticos del país, de la Revolución haciendo actos con gente (aglomeración), relajando las medidas estrictas de seguridad que nos han llevado a controlar el coronavirus”, alertó Maduro
Por esas razones pidió a la ciudadanía no bajar la guardia, mantener la disciplina y a actuar con conciencia para evitar escenarios negativos de rebrote, como los que se han registrado en otros países.
“Le digo a Venezuela: si usted se relaja, compatriota, si usted deja que de su familia haya gente que se relaje, aquí pudiera venir un rebrote como está pasando en Japón, en Corea del Sur, en Singapur, en Alemania”.
Venezuela ha presentado resultados favorables en el combate contra la coronavirus, a pesar de compartir fronteras con Brasil (epicentro de la pandemia en América Latina y segundo país con más contagios a escala mundial) y Colombia, desde donde se ha incrementado el número de casos de contagio entre los migrantes (de nacionalidad venezolana) que en las últimas semanas regresan por miles a su país, víctimas de maltrato y xenofobia en naciones de América Latina.
