Empresarios estadounidenses estarían presionando al presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, para que reconsidere su política con Venezuela y así abandone la “campaña de máxima presión” contra el país.
De acuerdo a un artículo publicado por The Wall Street Journal, un grupo de empresarios estadounidenses estarían pidiendo a Trump que tenga una negociación más abierta con el presidente de la República, Nicolás Maduro.
El empresario Harry Sargeant, ligado al sector energético, estaría explicando a la futura Administración de Donald Trump las posibles ventajas de lograr un acuerdo con Nicolás Maduro, tras alegar que podría tener dos beneficios importantes.
Según el reporte, los empresarios argumentan que un eventual acuerdo entre Trump y Maduro recudiría la migración ilegal y disminuiría los precios de la energía para los consumidores estadounidenses.
Asimismo, alegan que un acercamiento con Venezuela facilitaría el suministro de petróleo, aumentando así el acceso a energía a precios más competitivos.
“Al facilitar el suministro de petróleo a EEUU y aceptar los vuelos de deportación estadounidenses, Maduro podría ayudar a cumplir los principales objetivos políticos de Trump”, citó la publicación.
Sargeant añade que “el renovado flujo de asfalto venezolano de alta calidad y bajo costo hacia EEUU ha sido un beneficio para el contribuyente estadounidense”.
Además, puntualizó que la actual política de sanciones ha perjudicado a los competidores estratégicos de Estados Unidos, al convertir el petróleo venezolano en un recurso de bajo costo que, favorece a la economía china.
Queda esperar si la Administración de Donald Trump considera las sugerencias de los empresarios estadounidenses, dado que el equipo que el mandatario electo ha anunciado en las últimas semanas se ha mostrado radical en su posición contra Venezuela.
Tal es el caso del senador Marco Rubio, electo para ocupar el cargo de secretario de Estado. El republicano en reiteradas oportunidades ha rechazado las flexibilizaciones que ha hecho el presidente Joe Biden para operaciones petroleras en Venezuela.