“Es antinatural que Colombia y Venezuela se separen, ya que somos un mismo pueblo, nos unen lazos de sangre, históricos y genéticos»; expresó el presidente neogranadino, Gustavo Petro, tras una reunión de trabajo sostenida con su homólogo, Nicolás Maduro, previo a la firma de una declaración conjunta para fortalecer las relaciones de ambas naciones.
En sus declaraciones destacó la necesidad de que ambos países avancen en la reconstrucción de las relaciones en el ámbito de la inteligencia policial y militar en la frontera, como parte de los acuerdos en materia de seguridad y comercial, áreas que se ven afectadas por las mafias que operan en la zona.
Precisó que el objetivo no es «atacar al trabajador, al campesino, sino al dueño del capital, que es el que se lucra de esta abominable; actividad económica, como lo es el tráfico de drogas».
Sentenció que quienes dirigen estas mafias «es la expresión de un fracaso de algo que se llama la guerra contra las drogas que comenzó hace 50 años; y lo que ha dejado hoy en desestabilización democrática, un millón de muertos en América Latina y territorios que se han perdido».
Defensa de la Selva Amazónica
Además, en la declaración conjunta de ambos presidentes, el mandatario del vecino país explicó que conversaron de llevar una política común a la Cumbre Climática de las Naciones Unidas, COP27, que se desarrollará este mes en Egipto.
«Un esfuerzo común, entre los países que tenemos responsabilidad en la selva amazónica, para la COP27, es uno de nuestro acuerdos. Que Venezuela nos ayude, nos ayudemos mutuamente, ojalá Brasil se integre, porque es fundamental y determinante; una lucha que tiene que ser de la humanidad que es la defensa, la revitalización y la recuperación de la selva amazónica como un pilar climático fundamental para la existencia humana»; recalcó el presidente Petro.
Prensa Presidencial.