Tras las fuertes acusaciones sobre la responsabilidad de los Estados Unidos, en la explosión de los gasoductos de Nord Stream, otra historia hollywoodense se puso en marcha.
Teoría de conspiración, un grupo involucrado con el gobierno ucraniano y empresas fantasmas lideran el protagonismo de esta nueva trama.
En esta oportunidad, el diario británico The Times, indicó que los países occidentales sabían sobre la responsabilidad de una supuesta empresa privada de Ucrania, en este hecho.
Este artículo señala directamente a «una empresa privada originaria de Ucrania» y no «por estadounidenses, rusos o polacos».
«El nombre del patrocinador privado sospechoso, un ucraniano no afiliado al Gobierno del presidente Zelenski, ha estado circulando en ámbitos de inteligencia durante meses, pero no [ha sido] revelado»; reza el texto
A su vez, The New Your Times sacó un artículo en el que señala a un grupo proucraniano como responsables de estos hechos. Asimismo, descartó la participación de Occidente en las explosiones.
Esta información es publicada luego de que el periodista y ganador del premio Pulitzer, Seymour Hersh, realizara una investigación sobre este caso, donde aseguró que buzos de la Armada de EE.UU. colocaron los explosivos en el Nord Stream.
En este sentido, el portavoz de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, John Kirby, reiteró que los Estados Unidos que «no tuvo nada que ver con eso».
«¿Qué? No puede ser verdad. No pueden ser tan estúpidos. ¿Son tan estúpidos?»; indicó John Kirby.
Dos de los periodistas de The New York Times, a cargo de las revelaciones sobre la explosión de Nord Stream, publicaron en 2020 una historia falsa sobre que Rusia pagaba para que mataran soldados estadounidenses en Afganistán. La historia se basada en "fuentes de inteligencia" pic.twitter.com/RB5eTNoL2m
— Bruno Sgarzini (@brunosgarzini) March 8, 2023
Rusia asegura que se trata de un «bulo mediático»
Ante estos nuevos datos que pareciera una historia hollywoodense, el portavoz presidencial ruso, Dmitri Peskov, aseguró que esto se trata de un «bulo mediático», que pretende desviar las investigaciones de los verdaderos responsables.
«Todo esto no es solo raro. Esto huele a crimen atroz. Como mínimo, los países accionistas de los Nord Stream y la ONU deberían exigir una investigación urgente y transparente en la que participen todos los que puedan arrojar luz»; señaló.
Pese a todos estos señalamientos, hasta el momento, no se han mostrado avances en la investigación, no se han identificado a los responsables, tampoco se proporcionó el nombre de la supuesta empresa privada involucrada.
