El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dio un paso decisivo al aprobar una propuesta de resolución clave patrocinada por Estados Unidos. Esta resolución autoriza formalmente la creación de una Fuerza Internacional de Estabilización (FIE) en la Franja de Gaza, una acción que implementa directamente la propuesta del presidente Donald Trump.
La votación se saldó con un resultado abrumador de 13 votos a favor, demostrando un amplio consenso internacional. Rusia y China se abstuvieron, pero ninguna nación votó en contra del texto. Esta iniciativa establece un mandato inicial de dos años para la Fuerza Internacional de Estabilización. Además, la resolución estipula que la FIE trabajará en estrecha coordinación con los gobiernos de Israel y Egipto. Esta colaboración busca garantizar la eficacia operativa y la legitimidad regional de la nueva fuerza.
Específicamente, la resolución detalla una serie de tareas fundamentales que la FIE debe asumir inmediatamente. En primer lugar, la fuerza debe asegurar las fronteras de Gaza para prevenir el contrabando y garantizar la estabilidad. En segundo lugar, tiene la crucial misión de proteger a la población civil de cualquier amenaza. Asimismo, la FIE debe facilitar la entrega continua de ayuda humanitaria, un aspecto vital para la supervivencia de los habitantes de Gaza. De igual manera, la fuerza internacional se encargará de capacitar a una fuerza policial palestina reconstituida, buscando restablecer el orden interno. Finalmente, y como una de las tareas más sensibles, la FIE supervisará el desarme de Hamás y otros grupos de la resistencia palestina.
Mandato clave: Seguridad, ayuda y desarme supervisado
Por otra parte, la resolución incluye una disposición fundamental relacionada con la retirada militar. Concretamente, indica que las tropas israelíes se retirarán completamente de la Franja de Gaza una vez que la FIE haya asumido el control total del territorio y de las funciones de seguridad. Adicionalmente, la resolución crea una Junta de Paz transitoria que liderará Donald Trump. Consecuentemente, esta Junta coordinará aspectos esenciales como la seguridad, la asistencia humanitaria y la reconstrucción de la infraestructura, todo ello con el objetivo final de avanzar hacia una Autoridad Palestina reformada y funcional.
Esta medida de gran alcance forma parte de un plan más amplio que el presidente Trump presentó a finales de septiembre con el propósito de poner fin al conflicto en Gaza. Sin embargo, la iniciativa no ha sido recibida con aceptación unánime. De hecho, diversos movimientos de resistencia palestina, entre ellos Hamás y Yihad Islámica, han manifestado su rotundo rechazo a la propuesta. Ellos la han calificado duramente como un simple cambio de la “ocupación israelí por una tutela extranjera”, desafiando la legitimidad y los objetivos a largo plazo de la Fuerza Internacional de Estabilización.



