La Organización Mundial de la Salud está preocupada con lo que sucede en América Latina y la variante brasileña de la covid-19. Por esta razón el organismo coloca a la región en emergencia.
La cepa brasileña, conocida como P.1, es más contagiosa que la versión original de la enfermedad y ya está presente en casi todos los países de la zona.
El director de la OMS, Tedros Adhanom, dijo sobre este caso que “la situación es muy seria y estamos muy preocupados. Las medidas sanitarias que Brasil tome deberían ser agresivas, al mismo tiempo que avanza en la vacunación”.
Pero la posibilidad de que el gobierno de Bolsonaro al fin reacciones ante esta situación lucen remotas. La posición del gobernante derechista respecto a la enfermedad es invariable. Desde el comienzo subestima la pandemia como una simple «gripezinha».
Incluso en los últimos días puso de relieve su desprecio hacia quienes le exigen la compra de vacunas. A ellos les dijo idiotas y llorones.
Lo preocupante de la desatención de Bolsonaro es que esta no solo afecta a Brasil, sino que ya ha comenzado a poner en peligro a toda América Latina.
Sobre esto, Adhanom declaró que «la preocupación no gira tan solo en torno a Brasil, sino también en torno a los vecinos de Brasil. Es casi América Latina en su conjunto, muchos países, excepto dos más o menos».
El director de la OMS remató diciendo que «Si Brasil no se lo toma en serio, afectará a todos los vecinos y más allá».
Esta afectación ya está pasando. La cepa brasileña ya está en Venezuela y esto ha generado un estado de alerta entre las autoridades y la población. Esta variante es más contagiosa y agresiva en el organismo.
La semana pasada Brasil se convirtió en el nuevo epicentro de la pandemia. Si bien tiene mesos casos de contagios que EE.UU. e India, el país sudamericano registra la mayor cantidad de casos diarios.
Adicionalmente Brasil tuvo varias jornadas seguidas con picos históricos de muertes diarias por la covid-19; lo que confirma a América Latina como una región en emergencia.