La Organización Mundial de la Salud (OMS) declaró este lunes que, la covid-19 se mantiene «como una emergencia sanitaria de alcance internacional». Esto debido a que, sigue siendo «una enfermedad infecciosa peligrosa» que puede causar daños considerables a la salud de las personas y a los sistemas de sanidad de los países.
La pandemia se encuentra probablemente en un «punto de transición». El mismo, sigue necesitando una gestión cuidadosa para «mitigar las posibles consecuencias negativas», añadió la OMS en un comunicado.
Los expertos del Comité de Emergencia han señalado en su recomendación a Tedros que, ahora hay que reflexionar en cómo pasar de una fase de emergencia a una fase de normalidad -en la que se conviva con el virus- de manera segura.
3 años del inicio de la pandemia
Han pasado 3 años desde que la OMS declaró por primera vez que el COVID representaba una emergencia sanitaria mundial. Más de 6,8 millones de personas han muerto a causa de la pandemia; que ha afectado a todos los países del mundo.
El impacto del virus ha asolado comunidades y la economía mundial. Sin embargo, la llegada de vacunas y tratamientos ha cambiado considerablemente la situación de la pandemia desde 2020. El director general de la OMS ha declarado que espera ver el final de la emergencia este año, sobre todo si se puede mejorar el acceso a las contramedidas a nivel mundial.
🔎 Las vacunas se someten a rigurosos ensayos clínicos y medidas de control de calidad antes de ser autorizadas y producidas.
En cada país, las vacunas se mantienen a temperaturas adecuadas hasta llegar a ti.
👉🏾 Conoce el recorrido de una vacuna: https://t.co/dqetap9iKI pic.twitter.com/mNerxkGJxw
— OPS/OMS (@opsoms) January 29, 2023
Salud y desigualdad
Desde el comienzo de la pandemia, sabemos que muchas minorías raciales y étnicas vivían en comunidades con un acceso inadecuado y, a menudo, en hogares multigeneracionales con menos espacio para respetar el distanciamiento físico.
«Las poblaciones negras, latinas e indígenas han vivido históricamente en comunidades de bajos ingresos con menor acceso a la atención y la educación que las comunidades blancas más ricas», aseguran expertos de la salud estadounidenses.
Un ejemplo de esto es Nigeria, un país del cual hoy mismo se reportó que se acaba de llegar a un 30% de cobertura de vacunación. Hecho que difícilmente puede parecer un éxito; aunque en realidad, sí lo es si se toma en cuenta que hace un año esa tasa apenas llegaba al 3%.
Lo interesante es que, los investigadores encontraron una discrepancia aún mayor en el exceso de muertes por afecciones no relacionadas con el covid-19. Sin embargo, esas disparidades históricamente han recibido poca atención en los medios de comunicación o en la sociedad en general.