Maduro envía carta a la ONU y fija posición sobre la Guayana Esequiba

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Como parte de las acciones diplomáticas para responder a la decisión de la Corte Internacional de Justicia, sobre el diferendo por el Esequibo venezolano, el presidente Nicolás Maduro envió una carta al secretario general de la ONU, Antonio Guterres.

Así lo expresó durante una reunión con el Consejo de Estado y el Consejo de Defensa de la nación, este jueves 7 de enero, en el Palacio de Miraflores, sede del Gobierno Bolivariano.

Dijo que la convocatoria a estos órganos busca establecer una gran consulta a todo el país, «a todas las facultades de derecho, organizaciones; expertos en temas de la defensa territorial en el Esequibo, para reforzar la posición de Venezuela ante los organismos internacionales”.

Asimismo, manifestó que la lucha por los derechos del país al territorio Esequibo, llama a la unión de todos los venezolanos y venezolanas. Además, calificó como histórico el acuerdo aprobado, por unanimidad, por la nueva Asamblea Nacional en su primera sesión ordinaria.

“Que se sepa que Venezuela está unida, hoy más que nunca en la defensa de la Guayana Esequiba y que el Esequibo es venezolano, históricamente nuestro. Ese territorio es nuestro, es de los venezolanos y venezolanas. Lo vamos a reconquistar en paz. Lo vamos a lograr”, sentenció.

Maniobra contra Venezuela

Ratificó el jefe de Estado venezolano que la Corte Internacional de Justicia (CIJ) actuó de manera irregular, ya que normalmente en cualquier caso pueden pasar hasta 3 meses o más para convocar a una audiencia. Mientras que a Venezuela pretendían imponerle una audiencia para el día 15 de enero.

“Hemos solicitado el cambio de fecha y nos informan que han cambiado la fecha por 10 días, para el 25 de enero”. Sin embargo, acotó que ese período sigue siendo un exabrupto y denunció que detrás de esas maniobras están las transnacionales petroleras.

La misiva

Al reiterar que Venezuela tiene sus derechos históricos garantizados y únicos, ofreció detalles sobre la carta que envió a través de la cancillería, para la máxima autoridad de la Organización de Naciones Unidas (ONU), Antonio Guterres.

La carta aclara que “hemos reiterado incansablemente que Venezuela nunca ha prestado su consentimiento para que la Corte (CIJ) conozca sobre la controversia territorial en la Guayana Esequiba. Mucho menos aún para involucrarla en una acción unilateral planteada por Guyana, en un asunto jurídico ya superado, como es el Laudo Arbitral de 1899”.

Igualmente, rescata el planteamiento del Acuerdo de Ginebra, firmado en 1966, con el cual quedó el asunto zanjado entre las partes. “Es un principio fundamental que la jurisdicción de la Corte Internacional sólo pueda fundarse en el libre consentimiento de los Estados”, indica el texto.

Por otra parte, el mandatario venezolano expresó su asombro por el hecho que “de forma deliberada” se haya asumido que la nación consiente la vía judicial como medio avenido; sólo porque se trate de una decisión del secretario de Naciones Unidas, hecho que calificó como inaceptable.

“Venezuela nunca otorgó plenos poderes para comprometer la voluntad de un Estado soberano, en cuestiones inherentes a su soberanía e integridad territorial; lo cual sienta terribles precedentes a nivel del derecho internacional. Una cosa es elegir un medio de resolución de controversias aceptado por ambas partes; otra es subrogar el consentimiento de una de las partes”, señala la carta enviada a la ONU.

De esta manera, el gobierno de la República Bolivariana de Venezuela ratificó su rechazo ante la decisión de la CIJ sobre su jurisdicción, de fecha 18 de diciembre de 2020, “dado que puede afectar gravemente sus intereses”.

 

 


 

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