Los vínculos derechistas del autoproclamado

Emmanuel Macron, presidente de Francia, se sumó a la agenda desestabilizadora y conspirativa del autoproclamado Juan Guaidó, a quien recibió en París en medio de intensas protestas contra sus políticas neoliberales que afectan a las mayorías.

Durante el momentáneo encuentro, Macron se pronunció en el palacio del Elíseo, en el que instó a la celebración de lo que llamó “elecciones presidenciales libres” en Venezuela y pidió un trabajo que pueda “recuperar la democracia”, mientras continúa la apatía de su Gobierno ante las demandas sociales que han agitado Francia.

Ante estas declaraciones, el canciller de la República, Jorge Arreaza, repudió en su cuenta de Twitter las pretensiones de Macron para hablar sobre democracia:

“Un Gobierno sordo y arrogante que no puede darle lecciones de democracia a nadie, mucho menos a Venezuela”

Es importante destacar que, Francia ha sido escenario de protestas y huelgas generales contra las políticas neoliberales adoptadas por la administración de Macron, conocido como “el presidente de los ricos”. En los últimos días se han intensificado las jornadas de manifestaciones en rechazo al proyecto de ley impulsado por el mandatario francés, que afecta el sistema de pensiones de los trabajadores exigiéndoles más años de trabajo, por lo que aseguran es una medida que atenta contra la justicia laboral.

Rechazo en España

Como parte de su gira desestabilizadora con la que también busca revivir su estatus político, Guaidó llegó a España, donde organizaciones sociales rechazaron su visita frente a a la sede del Ministerio de Relaciones Exteriores en Madrid.

Los manifestantes catalogaron al autoproclamado de “payaso fabricado por el imperio”. Aseguraron que Guaidó es manejado por los intereses estadounidenses.

En el país ibérico, el diputado opositor en desacato y derrotado, fue recibido por la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, y también se reunió con el presidente del Partido Popular (PP) de derecha, Pablo Casado, dado que el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez se negó a recibirlo.

La agenda internacional de Guaidó preparada por Estados Unidos quedó comprobada, luego que al terminar el encuentro con Casado, el dirigente español le exigió a Sánchez que destituyera al ministro de Transporte, José Luis Ábalos, por un encuentro que tuvo con la vicepresidenta ejecutiva de Venezuela, Delcy Rodríguez, en el aeropuerto de Madrid.

La gira conspirativa de Guaidó, que inició el fin de semana pasado, ha estado marcada por diferentes protestas en su contra, tal como ocurrió en Reino Unido y España.

En este sentido, es importante resaltar la vinculación de intereses políticos derechistas entre Guaidó y el PP que representa Pablo Casado, partido acusado de múltiples casos de corrupción con empresarios y cargos públicos pertenecientes a esa formación.

Ana Perdigón: