Luego de los actos violentos que se registraron en Sinaloa, México, y en aras de proteger la vida de los ciudadanos, las autoridades dejaron en libertad a Ovidio Guzmán López, hijo del narcotraficante Joaquín Chapo Guzmán.
«No puede valer más la captura de un delincuente que las vidas de las personas (…) se decidió proteger la vida de las personas y yo estuve de acuerdo con eso, porque no se trata de masacres», declaró el presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador.
Ovidio Guzmán había sido detenido por el Ejército de Culiacán, hecho que desató situaciones violentas en la entidad entre las fuerzas federales y sicarios del Cártel de Sinaloa.
La seguridad es nuestra principal preocupación y ocupación. Conferencia matutina. https://t.co/yL0zkcD1py
— Andrés Manuel (@lopezobrador_) October 15, 2019
Los enfrentamientos dejaron nueve heridos, vehículos incendiados y caminos bloqueados.
El abogado de Guzmán informó que la familia le informó que su cliente se había comunicado con ellos y dijo que estaba bien y libre.
Tras la liberación, AMLO aseguró que su Gobierno no tiene convenios con grupos del crimen organizado y no cambiará su política de seguridad, por lo que le pidió al pueblo mexicano confianza.
“Está bien pintada la raya, la frontera entre delincuencia y autoridades», apuntó.