Crecen las tensiones entre Moscú y los aliados militares de Occidente; así lo ratificó este lunes el ministro ruso de Asuntos Exteriores, Serguéi Lavrov, quien advirtió sobre los plates de la OTAN para imponer nuevas sanciones al Kremlin.
En este sentido, el titular de la cancillería enfatizó que Occidente quiere provocar una «pequeña guerra» en Ucrania; hecho que sin duda justificaría una nueva escalada de ataques a la administración de Vladimir Putin.
Serguéi Lavrov: No descarto que exista ese deseo de alimentar los sentimientos militaristas (en Ucrania) de hacer una ‘pequeña guerra’ para luego culparnos e imponer otras sanciones para dañar nuestras capacidades competitivas.
Las afirmaciones de Lavrov se basan en un conjunto de informes publicados entre octubre y noviembre; en los que se señala la inversión de al menos $100 millones en un sistema antitanque y municiónes. Monto que se suma a los más de $2500 millones inyectados por la OTAN al sistema de ataque militar de Ucrania, desde el año 2014.
Por otro lado, el diplomático catalogó de “grosera” la actuación de Occidente; las cuales evidencian, más allá de los intereses políticos y económicos de las grandes potencias, las presiones ejercidas por el de presidente ucraniano, Vladímir Zelenski, cada día más desacreditado.
Serguei Lavrov: (Zelenski) suele cometer actos simplemente imprudentes y las autoridades occidentales han empezado a comprender el peligro que representa. Tienen miedo de la imprudencia, miedo de que alguna estupidez pueda encender un conflicto que, en general, nadie necesita.