La Organización Mundial de la Salud (OMS) desmintió este martes una de las informaciones falsas que más circulan en los últimos días sobre el coronavirus, aclarando que el patógeno tiene origen animal y no proviene de un laboratorio.
En primer lugar, informó sobre la procedencia del patógeno resaltando que muchos investigadores han podido analizar las características genéticas del virus y continúan trabajando en el origen del virus. «Toda la evidencia que tenemos sugiere que el virus tuvo un origen animal y no sufrió manipulaciones genéticas», aclaró Fadela Chaib, portavoz de la organización.
«Todavía no conocemos la fuente inicial, pero todo apunta a su origen animal y que no fue ni manipulado ni construido en un laboratorio o en algún otro sitio. Esta es la posición de la OMS como una organización que se basa en la ciencia», insistió Chaib.
La OMS indicó que lo más probable es que tenga su reservorio ecológico en los murciélagos, pero aún está por verse y descubrir cómo el virus pasó de los murciélagos a los humanos, detalló.
Entretanto, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha insistido en responsabilizar a China de que el virus SARS-CoV-2 surgió de un laboratorio en Wuhan, donde se registró el primer brote del coronavirus. Adicionalmente, anunció una investigación sobre cómo el virus se diseminó al resto del mundo.
Ante la acusación del mandatario estadounidense, Beijing rechaza las declaraciones y la portavoz de la comunicación de la OMS ratificó que «no solo luchamos cada día contra la pandemia, sino también contra la infodemia», refiriéndose a que se debe luchar contra la desinformación.
