Este jueves se desarrolló el cierre de la III Convención Nacional de Estudios y Formación Avanzada de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV), con la participación de distintos ponentes, quienes explicaron a través de sus conocimientos y experiencias la causas de la crisis climática en el mundo.
La actividad contó con la presencia de la vicepresidenta sectorial para Ciencia, Tecnología, Educación y Salud, Gabriela Jiménez Ramírez, en compañía de la ministra del Poder Popular para Educación Universitaria, Sandra Oblitas Ruzza y la abogada y parlamentaria comunal Eglee Aponte.
Durante su intervención, la también ministra para Ciencia y Tecnología, Gabriela Jimenéz Ramírez, indicó que la crisis climática es consecuencia del modelo civilizatorio impuesto por el capitalismo.
“Hablar del cambio climático y más en este tercer encuentro, es más un acto de reflexión para tomar las medidas y las consideraciones desde la formación, desde la producción y desde la organización de lo que debemos hacer”, indicó.
Siguiendo la línea de Chávez
Destacó que en el Quinto Objetivo Histórico del Plan de la Patria creado por el Comandante Chávez ya se advertía sobre el incremento de los desiertos y la pérdida de agua en el mundo.
“Hoy se sabe, y está reportado por académicos, por la ciencia, por los movimientos ambientalistas y ecologistas, que el 20% de la diversidad biológica terrestre se perdió y que hay un millón de especies amenazadas”.
Explicó que este modelo capitalista atenta contra la racionalidad de la vida, cambiando los ciclos, el clima y la relación del hombre con la naturaleza.
La Vicepresidenta detalló que “el principal problema no es solo la crisis climática, sino como nosotros o el mundo concibe el trabajo y cómo esas formas de industria se establecieron para el uso y la explotación de los recursos naturales sin garantizar el derecho a los pueblos”.
Manifestó que “la salud que entendemos y que fue consecuencia de la modernidad y del sistema educativo eurocentrista colocó la fauna, la naturaleza, las formas de vida vegetales. Las formas de vida animales y el hombre en hecho de supremacía sobre la naturaleza como un objeto de explotación, al que todo tenía un costo y pagábamos por ello”.
Igualmente, comentó que el mundo desestima la importancia de la ecología y la agroecología para la “interpretación de las consecuencias de las crisis climáticas que es consecuencia de un modelo económico impuesto por la hegemonía del capitalismo”.
Reflexión necesaria
Recordó que es importante reflexionar sobre todos estos temas desde las comunidades, “La vida en comunidad se convierte en un epicentro para la reflexión de los desafíos teóricos; prácticos y de convivencia que debemos desarrollar para enfrentar las consecuencias de la crisis climática”.
Indicó que el Sistema Bolivariano viene construyendo una nueva filosofía que reconoce los saberes ancestrales, pero que además descarta por completo la supremacía del hombre sobre la naturaleza y la reconoce como parte de la realidad humana.
“El proceso educativo bolivariano responde al respeto de los derechos humanos, responde a elementos de la realidad, de la convivencia. Hábitos saludables y reconoce la importancia del ecosistema y de la vida en armonía”.
Con respecto a los procesos tecnológicos, detalló que estos deben ser herramientas que contribuyan a establecer estrategias que permitan garantizar la producción del país. Igualmente, la formación de los jóvenes con un estado de nivel de pensamiento crítico sobre la responsabilidad de los humanos en la protección de la vida.