Aproximadamente 500 ciudadanos bolivianos que se encontraban en Chile, fueron reprimidos y detenidos mientras buscaban la vía para retornar a Bolivia por la frontera occidental, a partir de un decreto del gobierno golpista de Jeanine Áñez que impide la entrada de los bolivianos a su propio país, para evitar la propagación del Covid-19.
“La presidenta de Bolivia lanzó el decreto de cierre de fronteras y eso nos agarró desapercibidos, no nos dio ningún lapso de tiempo para poder entrar a nuestro país. Se lanzó el decreto y ya había militares que no nos dejaban pasar”, declaró Danny Yujra, ciudadano de Bolivia, a la agencia Anadolu.
Según información reciente del ministro de defensa del gobierno de facto de Bolivia, Fernando López, estos ciudadanos se establecerán en un campamento armado en la población boliviana de Pisiga.
“Las medidas de seguridad sanitaria empiezan con dos controles previos (en el campamento). Tenemos un laboratorio y personal de salud, hemos trabajado en equipo”, declaró López a la Agencia Boliviana de Información.
Sin embargo, las personas presentes en el campamento, indican que el mismo fue dispuesto por las autoridades locales de Chile.
Exigimos al gobierno de @JeanineAnez y @KarenLongaric la inmediata repatriación de nuestros hermanos bolivianos. La decisión inhumana y violatoria a los derechos humanos de no permitirlo será pasible a un juicio. Más aún cuando cierran fronteras a los pobres y abren a sus amigos pic.twitter.com/a7NFLTQ58Q
— Sonia Brito (@soniabrito07) March 30, 2020
Por otra parte, Evo Morales, a través de sus redes sociales se refirió a la situación que están afrontando los ciudadanos en la frontera:
Pido que se repatríen a nuestros compatriotas que están en Chile. Es inhumano e ilegal dejar a niñas/os, mujeres embarazadas y personas de la tercera edad en esas condiciones. Es un deber irrenunciable del Estado el velar por sus ciudadanos en cualquier lugar del mundo.
— Evo Morales Ayma (@evoespueblo) March 30, 2020
La política represiva del gobierno de facto de Jeanine Áñez, contrasta con el modelo de solidaridad y humanidad demostrado por la Revolución Boliviana. Este pueblo hermano se enfrenta a una dictadura que ha revertido todos los alcances sociales que habían llevado a Bolivia a ser ejemplo mundial de justicia social.
Hasta la fecha ha demostrado su incapacidad de establecer políticas coherentes en materia social y de salud. A pesar de las cifras oficiales, existe un manto de silencio con respecto a la situación interna de Bolivia sobre la atención a la pandemia del Covid-19.