Indultar a la Gata Flora | Por: Roberto Hernández Montoya
Quienes rechazan el indulto están entre dos sombras: si aceptan, reconocen el rrrÉgimen pero si lo rechazan, siguen en prisión o en tribunales. El mismo peine con las lanchas que una brisa diligente le aventó a Duque hasta Venezuela: Maduro le ofrece devolverlas, pero tiene que solicitarlas y reconocerlo. Mejor perderlas.
Pero hay algo más grave: si dejan de ser “perseguidos” por la “narcodictadura” se les acaba la manguangua y Trump ya no les picha la mesada y a buscar trabajo será, digo yo, no sé, ¿ya dije que me importa un pepino, que me sabe a casabe, que me da lomo? Les digo como Joselo: “Hermano: Si necesitas dinero… ve a ver cómo lo consigues. Y si tienes un problema… ve a ver cómo lo resuelves”. Que se busquen la vida.
¿Se puede legalmente rechazar un indulto? O sea, le dices a Iris:
—Gracias, doctora Varela, pero me quedo en la cárcel porque no reconozco a Maduro. Y páseme doble llave, porfa.
Pero si se queda en prisión también lo reconoce porque es una cárcel del rrrÉgimen donde se queda por su voluntad, no por la fuerza, o sea, que no está en prisión sino temperando. Iris: Cóbrales alquiler.
Son contumaces como la hidra de 110 cabezas, decapitas una y le nacen dos. O sea, que harán el ridículo de siempre: aceptar cínicamente el indulto y seguir en lo mismo. Ya una vez Chávez concedió una amnistía que patearon y siguieron guarimbeando, plantando bombas, incendiando, quemando gente viva, pidiendo invasión, haciendo negocios con Los Rastrojos, descuartizando, atentando con drones y ahora dilapidarán otra millonada para que los medios mercenarios refloten la descalabrada matriz de la “narcotiranía”.
Pero el voluble Trump se va a hartar de ellos una tarde y les va a vociferar su frase favorita: “You’re fired!” ‘¡Pa fuera!’. Biden también, porque o caen con el chingo o sucumben con el sin nariz. Pierden hasta cuando ganan. Oootra derrota perfecta.
ROBERTO HERNÁNDEZ MONTOYA
Indultar a la Gata Flora | Por: Roberto Hernández MontoyaPublicado en ÚN.