El Departamento del Tesoro de Estados Unidos reveló que el hijo del presidente Joe Biden, Hunter, presuntamente está vinculado a una red de tráfico sexual.
De acuerdo a documentos del Departamento del Tesoro, Hunter Biden pagó a una red de tráfico sexual de Europa del Este y falsificó cheques para pagar a prostitutas.
Los informes de actividad sospechosa (SAR, por sus siglas en inglés) rescatados por los medios muestran que la actividad bancaria de Biden, la cual investigan desde 2019 por crímenes financieros.
Además, los datos bancarios reflejan que Biden hizo nueve transferencias persona-persona (P2P) por un total de 30.900 dólares.
Uno de los documentos fue presentado por la empresa Wells Fargo el 17 de diciembre de 2019, en el cual señalan a 25 personas vinculadas a la presunta red de tráfico sexual.
Asimismo, reflejan casi 7 millones de dólares en transacciones sospechosas, algunas incluían cheques de Hunter posiblemente falsificados para pagar prostitutas desde su cuenta empresarial.
“Biden transfería dinero a personas que podrían estar vinculadas a una red de prostitución de Europa del Este (…) Los investigadores seguían a varios clientes sospechosos de ser parte de una red de tráfico sexual vinculada a Biden»; dice el diario Daily Mail, que tuvo acceso a los documentos del Tesoro.
El Tesoro rastreó 1.162.732 dólares enviados por un socio y amigo de la familia Biden, Rob Walker, a la empresa de Hunter, Owasco.
Por otra parte, los investigadores informaron que el hijo del presidente retiró 105.492 dólares en efectivo de Owasco y 263.978 dólares de sus cuentas personales entre febrero y noviembre de 2017.
“Estos retiros de efectivo se llevaron a cabo durante un período de tiempo durante el cual Biden había admitido públicamente un uso intensivo de drogas y prostitutas”; añadió el documento.
Walker y Biden colaboraron en varios negocios en el extranjero que actualmente son objeto de investigación penal; incluida una multimillonaria empresa energética conjunta con la compañía CEFC.
Vale recordar que en mayo pasado, publicaron 10 mil fotos privadas de una de las computadoras portátiles de Hunter Biden, la cual mostraban pedofilia de su parte.
La justicia estadounidense investigó a Hunter por evasión fiscal, por presuntamente no pagar al fisco más de 100.000 dólares en 2017 y 2018.
También, lo acusan por la compra ilegal de un arma de fuego en 2018 pese a sus problemas de adicción a las drogas.
Hunter Biden también está acusado de compra ilegal de un arma de fuego en 2018 pese a sus problemas de adicción a las drogas. Este cargo implica una pena máxima de 10 años de prisión.