Guaidó cambia discurso y quiere diálogo: ¿Qué tiene que ver La Casa Blanca?

Luego de que el ultraderechista Juan Guaidó cambiara su discurso drásticamente y pasara de exigir la salida indefectible del gobierno legítimo del presidente Nicolás Maduro, al llamado para establecer “acuerdos” y negociaciones; varias han sido las reacciones de actores políticos nacionales e internacionales con los que se vincula el opositor.

En el marco de la elección de una nueva directiva del Consejo Nacional Electoral (CNE), caracterizada por el pluralismo; entonces sale esta nueva declaración de Guaidó de cara a las venideras elecciones regionales y municipales.

El autoproclamado presidente interino pasó de exigir “cese de la usurpación, gobierno de transición y elecciones libres”; a implementar esta nueva estrategia, que no se sabe ya a cuál sustituye, que es la de conseguir un “Acuerdo de Salvación Nacional” con el que el país pueda superar “la peor crisis de su historia”. Este nuevo plan incluiría el levantamiento de las sanciones de EE.UU., el mecanismo de “máxima presión” como medida radical del ala opositora que buscó derrocar a Maduro.

Lo que dice La Casa Blanca

Como era de esperarse. Una de las primeras reacciones de respaldo al discurso de Guaidó, fue la de La Casa Blanca, aunque podría pensarse que tal acción es una jugada de la administración estadounidense que dirige las operaciones del opositor; incluyendo el secuestro de los activos en el exterior.

“Apoyamos los esfuerzos de Juan Guaidó, y la oposición venezolana para restaurar de forma pacífica la democracia en Venezuela a través de elecciones presidenciales y parlamentarias libres. La solución a la crisis es un acuerdo comprensivo que lleve al resultado que venezolanos merecen”; mencionó el embajador de EE.UU. para Venezuela, James Story a través de su cuenta Twitter.

Antes se negaban a cualquier tipo de negociación con el gobierno de Maduro. Sin embargo, varios actores políticos de la oposición se han sentado en mesas de diálogo. Ahora Washington dice que “las condiciones mínimas para las elecciones incluyen la liberación incondicional de los presos políticos; mayor acceso a ayuda humanitaria, libertad de prensa, rehabilitación de partidos políticos y políticos para que los venezolanos puedan elegir por sí mismos a sus líderes”.
Y es que a esto le antecede que el gobierno de Joe Biden, según Bloomberg ya viene revisando su política de sanciones contra Venezuela; a sabiendas de que parece inviable seguir apostando a las agresiones como presión para derrocar al gobierno bolivariano.
La cadena informativa RT refirió tras consultar con varios analistas que, en Venezuela puede abrirse una negociación a dos bandas: una lenta, con el plan Guaidó apoyado por Washington; y otra rápida, con figuras de la oposición que no pertenecen al G-4 (Acción Democrática, Primero Justicia, Voluntad Popular y Un Nuevo Tiempo) y que aspiran a cargos públicos en las próximas elecciones regionales.

 


Daniela Jiménez: