Las funerarias en Estados Unidos (EE.UU.) nuevamente se están quedando sin espacio, específicamente en el estado de Idaho, ante el aumento de las muertes a causa de la covid-19; en especial en los ciudadano que no se han vacunado.
«En Idaho, la COVID-19 ha causado la muerte a un promedio de 20 personas al día durante la última semana«, indicó un reporte de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades.
El estado estadounidense tiene una de las tasas de vacunación más bajas de EE.UU., en el que solo el 41,3% de los ciudadanos está vacunado con ambas dosis.
La situación por la covid-19 se ha agravado por la circulación de la variante Delta, por lo que tanto los hospitales, funerarias y morgues están trabajando al límite.
Actualmente, los hospitales de Idaho están desbordados, del 90% de las camas de Unidades Intensivas que están ocupadas; el 58,6% corresponden a pacientes contagiados del virus.
Con el objetivo de evitar las morgues improvisadas que se vieron durante la primera ola del virus, esta vez se dispuso de un remolque refrigerado; el cual se llenó en solo una semana de haberse instalado.
Esta situación ha evidenciado que septiembre ha sido el peor mes en caso de muertes para el estado, en especial para el condado de Ada, que es el más poblado.
Las muertes de los residentes de Idaho alcanzan las 2,573 personas según información de la División de Salud Pública del estado.
Según Dave Salove, quien dirige una funeraria en la localidad de Boise, la sala de refrigeración de 16 ranuras se han abarrotado y ese mismo escenario se repite en otros locales.
Asimismo, el forense Dotti Owens agregó que en oportunidades han tenido que almacenar los cuerpos hasta el día siguiente, por la falta de espacio.
Tras esta situación las autoridades hacen un llamado a la población a vacunarse, dado recibir las dosis evita casos graves de hospitalización y posibles muertes.
