Tras su recuperación por covid-19, el presidente de la Asamblea Nacional Constituyente, Diosdado Cabello, contó que apenas despertó de una fase muy avanzada y delicada de tratamiento por la covid-19, pensó retirarse de la política. Aseguró que rápidamente se sobrepuso y entendió que Dios y la vida le habían dado una segunda oportunidad para seguir trabajando con amor por la Revolución. Reiteró que fue atendido en un hospital igual que cualquier persona y se dice más creyente que antes en la fe del pueblo.
«Dios me dio otra oportunidad. La vida me está dando otra oportunidad y sentí que la oportunidad era para seguir haciendo lo que estoy haciendo con más amor. Lo que hemos avanzado en 27 días (en fisioterapia) es grande. Hemos puesto voluntad, disciplina, hemos hecho lo que han dicho los médicos. La familia está allí montada, es una dictadura en la casa demasiado severa. Hay una tiranía absoluta (sonrisa) y lo esconden detrás de una falsa democracia, vamos a someterlo a votación, 4 a 1.Pierdo yo. Es una tiranía».
El presidente de la Asamblea Nacional Constituyente relató que los médicos le recomendaron ir de manera preventiva a una fase más avanzada de tratamiento, para evitar reaccionar tardíamente. Él aceptó y así fue como estuvo intubado durante 11 días continuos, sedado. Cuando despertó de ese estado, narró, «no podía hablar bien y pensé en llamar al Presidente, le mandé mensaje y hablé con él al día siguiente, el 29. Porque lo primero que pensé fue retirarme de la política, porque no sabía cómo iba a quedar. Ernesto, yo puedo decirlo aquí, yo no me paraba, yo no tenía fuerzas para ponerme de pie, mis piernas no me sostenían. Tenían que ayudarme».
«Era muscular y quizá un poco de coordinación, porque tú pasas el tiempo que estás allí y los músculos están en reposo absoluto (…) Dicen los expertos que un atleta de alto rendimiento pasa 14 días en la condición que estuve yo y nunca más recupera, entonces yo no se cómo iba a quedar. Me veía complicado», prosiguió su relato.
«Fue un instante, una ráfaga (lo de abandonar la política), porque cuando hablé con Marleny; Marleny siempre me da una energía. Así fue el 4 de febrero, así fue cuando me incorporé cuando la campaña con el Comandante en el 97. Esa es la fuerza: anda y haz lo que tengas que hacer. Entonces hablé con ella por teléfono, 11 días sin hablar ni con ella ni con mis hijos. No era fácil».
Asimismo, Diosdado Cabello, dijo que había perdido la noción del tiempo, «no tenía ni idea de los días que estuve allí. No fueron agradables porque no hay ningún nivel de conciencia. Luego la incomodidad de no poder dormir, la incomodidad de recordar unas cosas y otras no. La incomodidad de que no podía ni comer».
Mensaje a la población
Al contar su experiencia de vida, el líder de la política nacional, tras 27 días de tratamiento médico, volvió a insistir en la necesidad de cuidarse.
«Es sencillo verlo desde otro lado. Yo le pido a la gente que se cuide. Se corre un riesgo terrible. Si la enfermedad encuentra donde darle a uno, el virus se posiciona ahí y toma control y comienza a dispararlo a uno todos los órganos y viene la debacle en todo caso. Cosa que uno no controla».
En ese sentido, comentó que perdió 15 kilos de forma acelerada, a causa de no recibir alimentos sólidos. Expresó «15 kilos rápido, los perdí porque mientras uno está allí no recibe alimentos normalmente porque tiene que ser vía sonda, puro liquido. A mi me daban comida por la nariz, liquida, sopa. Marleny estaba muy pendiente de eso y José David que estuvieron allí todo el tiempo».
Luego de la enfermedad, aseguró que revisó su forma de vida, cuenta que una situación de esa magnitud, «te obliga a cambiar (…) Yo antes era de acostarme a la 1:30 de la madrugada».
Solidaridad con los compañeros de lucha
Diosdado Cabello contó que tuvo conocimiento de lo ocurrido con Darío Vivas, compañero de lucha, luego de haber culminado su tiempo hospitalizado. Dijo que fue un golpe certero.
«Ya había salido de alta, cuando pasó lo de Darío, y luego lo trasladaron a otro sitio, porque necesitaba terapia, estaba cubierto, no se le podía atender y lo llevaron a otro sitio. El mismo equipo médico que atendió a Darío fue el mismo que me atendió a mi, que estuvo con nosotros, conmigo y los que estaban allí».
También comentó que «ahí llegó Tareck, mi familia, mi esposa y mis hijos, llegaron allí también, ellos (familia) no tuvieron síntomas mayores; pero era necesario tenerlos allí por como venía a mi la enfermedad. Estuvo el padre Numa allí y otros compañeros que llegaron ahí a ese sitio».
Lamentó la pérdida física del Jefe del Distrito Capital y militante del PSUV, Darío Vivas y expresó que fue un golpe certero.
«Yo por supuesto, algunos ni me entere, lo de Darío me entero una vez que ya me habían dado de alta. Un golpe certero, yo había hablado con los médicos; les dije pónganle mucha atención a Darío, él venía de una situación médica complicada hace como cinco años y yo decía que no vaya a complicarse Darío con esta enfermedad. Desafortunadamente no pudo. Y así como Darío otros compañeros. Llevaron al doctor Rangel, a El Potro».
También abordó elementos sobre las especulaciones que hicieron ciertos medios y sectores de la política en torno a su enfermedad. Diosdado Cabello Dijo «tú sabes que la gente comienza a especular; Diosdado debe estar en una clínica, a mi me atendieron exactamente igual como pueden atender a cualquier persona. Me pusieron las medicinas que le ponen a cualquier persona».
