Freddy Guevara escribió en twitter que solicita apoyo económico para costear el tratamiento anticovid-19 para su suegra, y parece que en vez de recibir dinero, primero le depositaron una cascada de críticas en efectivo.
El dirigente opositor, un conspicuo paladín de las sanciones y un apóstol de la ayuda humanitaria fue increpado por su iniciativa de abrir un “Go Found” cuando no son pocos de sus correligionarios que piensan que no es precisamente “un político limpio”.
Los tuiteros se precipitaron a dudar de su modestia, y lamentaron que su suegra tuviera al yerno que tiene, sospechado que la estaría instrumentalizando para proyectar la imagen de un político menesteroso de la misma clase de Lilian Tintori, que supuestamente sobrevive de los 100 dólares que se sacan de los bolsillos sus seguidores.
Guevara asegura que los mensajes positivos, los RT y los likes son abrumadoramente mayores que los comentarios negativos; pero su reacción revela que los “troleadores” lo inquietaron más que el cariño de sus “fanes”.
El activista de la organización Voluntad Popular se desbarató en aclaratorias que los tuiteros despacharon como el esfuerzo inútil de explicar las cosas con aclaraciones que oscurecen.
Oscuras aclaratorias
Guevara precisó que la supuesta ayuda humanitaria gestionada por la oposición no es en efectivo, ni tampoco para tratamientos hospitalarios; y que sí sería un despliegue de insumos médicos y suplementos alimenticios.
Mencionó también que la “Ayuda humanitaria no es dinero en una cuenta, ni la administra el Gob. interino, la AN, los diputados o Guaidó. Lo han aclarado mil veces los donantes, aunque muchos prefieren repetir mentiras”.
Si no es dinero, la Ayuda Humanitaria parece la fábula de un montón de cajas con insumos que nadie ha visto en Venezuela; una extraña trama de propaganda que serviría para recaudar recursos que se depositan en ninguna parte.
Una obra imaginaria
Explicado así, la Ayuda Humanitaria de Guaidó sería la obra más relevante y genuina de su gobierno imaginario sobre un territorio de mentira que los venezolanos, con esa forma ácida que tienen para descargar su venganza, llaman la República de Narnia.
Pero en todo ese despliegue de Freddy Guevara de pedir dinero para apoyar a su suegra se puede rescatar un instante de lucidez. El opositor al menos llamó al cuidado con una enfermedad que está muy dura.