La Fiscalía General de Brasil rechazó una demanda presentada por parlamentarios aliados al presidente Jair Bolsonaro, para iniciar una investigación sobre posibles fraudes en los elecciones celebradas el pasado 30 de octubre, que concluyó con la victoria de Luiz Inácio Lula da Silva.
De acuerdo la Fiscalía, el informe presentado por el Ministerio de Defensa sobre fiscalización de los comicios no presentan un hecho concreto; que justifique el inicio de una indagación sobre las urnas electrónicas.
Añadió que la demanda carece de «elementos de prueba» y que solo podría analizarse si presentase «algún hecho concreto».
Por el contrario, señalaron que las observaciones planteadas se deberían considerar solo para eventuales mejoras en el sistema electrónico de votación.
Según la fiscalización realizada por los militares en las urnas los días 2 y 30 de octubre, cuando se celebraron la primera y la segunda vuelta de las elecciones; no se halló nada que pudiera indicar fraudes, pero tampoco puede afirmarse que no ocurrieron.
La semana pasada, el timonel del Tribunal Superior Electoral, ministro Alexandre de Moraes, declaró que la controversia en torno a las urnas electrónicas está cerrado.
El TSE garantizó que los comicios fueron «limpios» y aseguró que no existen dudas sobre el proceso, avalado por todas las misiones de observadores independientes, tanto nacionales como internacionales.
“Las urnas electrónicas son motivo de orgullo nacional y las elecciones de 2022 comprueban la eficacia, la rectitud; y la total transparencia del recuento de los votos”, recalcó el TSE.
Sin embargo, a dos semanas de las elecciones Bolsonaro y sus aliados sigue sin reconocer claramente su derrota; pese a que ya inició el proceso de transición con el equipo designado por Lula.
Vale recordar, que tras conocerse los resultados de las elecciones un grupo de seguidores de Bolsonaro exigieron frente a as puertas de cuarteles del Ejército una «intervención militar», para impedir la investidura de Lula.