2.103 privados de libertad que se encontraban en el Centro Penitenciario de los Llanos (Cepella), ubicado en Guanare, Portuguesa, fueron trasladados de este penal a otras cárceles del país entre jueves y sábado pasado.
Luego de dar por finalizado el operativo, la ministra para asuntos penitenciarios, Iris Varela aseveró que en tres meses relanzarán el Cepella con el nuevo régimen penitenciario, basado en disciplina, estudio y trabajo, asimismo detalló que el jueves pasado trasladaron 698 presos, el viernes 716 y el sábado a 689, mientras que 5 reclusos fueron llevados a centros de salud por tener una «situación comprometida».
Del mismo modo, Varela mencionó que los reclusos fueron trasladados vía terrestre a penales ubicados en Barinas, Lara, Zulia, Falcón, Táchira y Carabobo. Los 1.718 (82.85%) trasladados pasaron a nuevo régimen penitenciario en los mencionados establecimientos y para las cárceles en transición evacuaron a 380 privados de libertad.
Cepella en vigilancia permanente
Luego del traslado, la cárcel de Guanare quedó bajo la vigilancia del Ministerio Penitenciario y la Guardia Nacional Bolivariana. Iris Varela indicó haber contratado al Fondo Nacional de Edificaciones Penitenciarias para que realicen las reparaciones necesarias en el mencionado penal y así reabrir el recinto con nuevo régimen en 3 meses como estiman.
Aclaró que el equipo de Min-Penitenciario realizará una requisa rutinaria en las instalaciones del Cepella para ubicar cualquier elemento que ayude a esclarecer los hechos violentos ocurridos el pasado 1° de mayo con saldo de 47 muertos y 67 heridos.
“Estamos cerrando un capítulo vergonzoso de lo que era el sistema penitenciario de Venezuela y quedaba aquí un reducto”, dijo la ministra quien añadió que se atendió a los familiares de los privados de libertad y destacó que publicaran listados con la identidad de los presos y la cárcel donde fue llevado.
Trabajo mancomunado
La titular del Servicio Penitenciario agradeció la colaboración del gobernador de Portuguesa, Rafael Calles y a las autoridades militares encargadas de la logística del traslado de los internos.
A su vez, el mandatario portugueseño aseguró que “no hubo ni un disparo en el proceso de desalojo” y aseveró que convertir al Cepella en un establecimiento con nuevo régimen ayudará a la paz y tranquilidad del estado.