Este domingo hay elecciones en Brasil para elegir a los alcaldes y concejales de más de 5 mil ciudades del país.
El evento es parte de la rutina electoral de esa nación pero esta vez está signada por la situación extraordinaria de la pandemia de la covid-19.
Lo interesante de esta convocatoria en la que más de 148 millones de brasileños están habilitados para votar es que se realizan en el tercer país con más contagios del coronavirus y el segundo con más fallecidos.
Al mismo tiempo son unos comicios que podrían ser vistos como un plebiscito a la gestión de Jair Bolsonaro. Y es que el proceso se da en un país cuyo Gobierno nacional subestima la gravedad de la enfermedad viral respiratoria que ha causado miles de muertos en todo el mundo. Para nadie es secreto que Bolsonaro ha hecho esfuerzos sostenidos por minimizar la covid-19 llamándole «gripezinha». Recientemente calificó de «maricas» a quienes se preocupan morir por la pandemia.
Por tratarse de una elección en tiempos de coronavirus, es obligatorio el uso de mascarillas y distanciamiento físico. Las autoridades comiciales ordenaron la apertura de las mesas más tempranos que de costumbre, y habilitaron horarios especiales para los grupos de riesgo ante la enfermedad.
La pandemia ha contagiado en Brasil a más de 5 millones 850 mil personas y le ha costado la vida a unas 166 mil personas. En la jornada de este sábado confirmaron 38.307 casos y 921 fallecidos.
Segunda vuelta
La Constitución establece que habrá una segunda vuelta para la elección de la autoridad gubernamental cuando ninguno de los contendientes obtenga más de la mitad de los votos válidos en la primera ronda. De modo que 95 municipios con más de 200 mil electores podrían tener una segunda ronda de votaciones para elegir alcaldes y vicealcaldes.
Los electores del Distrito Federal y del archipiélago Fernando de Noronha, en el Atlántico, no eligen alcalde. Además los brasileños registrados en el exterior solo pueden votar en las elecciones generales, que se hacen cada cuatro años.
PT fortalecido
El expresidente brasileño Luis Inácio Lula Da Silva votó temprano en estos comicios para elegir alcaldes y concejales. Luego de ejercer su derecho pronosticó a la prensa que su organización, el Partido de los Trabajadores, saldrá fortalecido.
“El partido saldrá muy fuerte en esta elección, incluso marcando una posición fuerte contra aquellos que apostaron toda su vida por el fin del PT”, dijo el exmandatario desde la ciudad de Sao Paulo.
Lula aprovechó la ocasión para apuntar contra de Bolsonaro, a quien calificó como “el mayor desastre político de este país”.
A esta demoledora definición agregó que “Bolsonaro destruye el hábito, destruye la costumbre, la cultura, la economía. Nunca hemos tenido tanto desempleo, tanta incertidumbre como hoy”, advirtió Lula.
Y para remarcar el legado destructivo del mandatario ultraderechista en Brasil, aseguró que como nunca antes el país estaba tan desmoralizado; y que su gestión acabó con la credibilidad y prestigio del país que en 2008 se convirtió en la sexta economía del mundo.