El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo este lunes que tomaría acciones militares (a través de la invocación de la Ley de Insurrección) en las diferentes ciudades y estados del país, si las autoridades estatales y locales no detienen las protestas que han surgido en los últimos días, por el asesinato de George Floyd, ciudadano afroamericano de 46 años que murió a manos del policía Dereck Chauvin, quien le puso la rodilla en su cuello por más de 8 minutos causándole muerte por asfixia.
«Alcaldes y gobernadores deben establecer la presencia abrumadora de las fuerzas del orden hasta que la violencia sea sofocada (…) si una ciudad o el estado se niega a tomar las acciones que son necesarias para defender la vida y la propiedad de sus residentes, entonces desplegaré a los militares de Estados Unidos y resolveré rápidamente el problema por ellos», afirmó Trump a los periodistas.
En este sentido, el mandatario estadounidense busca implementar tales medidas bajo la Ley de Insurrección de 1807, una ley federal cuyo contenido ha sido modificado varias veces desde que se aprobó por primera vez.
«Se autoriza el empleo de las fuerzas terrestres y navales de EE.UU.» para responder a «cualquier insurrección, violencia interna, combinación ilegal o conspiración» que «obstaculice la ejecución de las leyes de EE.UU. o se oponga a ella o impida el curso de la justicia establecido por esas leyes».
La ley otorga al Jefe de Estado las facultades para que militares puedan atacar a los manifestantes que completan 7 días en las calles exigiendo justicia por el asesinato del afroamericano George Floyd. Según el documento, el mandatario tiene derecho a aplicar la Ley de Insurrección sin consultar la medida con el Congreso, aunque debe hacerlo a través de una proclamación formal para dar tiempo a los residentes de las áreas afectadas a dispersarse y regresar a sus hogares en un tiempo limitado.
No obstante, Trump podría enfrentar ciertas dificultades al invocar el acto unilateralmente y sin contar con el apoyo de los gobernadores estatales. La ley indica que, «de producirse una insurrección contra el Gobierno en cualquier estado, el Presidente puede, a petición de su legislatura o de su gobernador si la legislatura no puede ser convocada, llamar al servicio federal, a la milicia de los otros estados, en la cantidad solicitada por ese estado, y utilizar a las Fuerzas Armadas que considere necesarias para reprimir la insurrección».
¿Cuándo ha sido aplicada la Ley de Insurrección de 1807?
La Ley de Insurrección fue utilizada por última vez en 1992 por el presidente George H.W. Bush durante los disturbios por la brutal agresión de 4 policías blancos contra el afroamericano Rodney King, en 1992 en Los Ángeles. Específicamente el 29 de abril de ese año, la ciudad de California estalló en protestas después de que un jurado encontró a los 4 policías de Los Ángeles no culpables de la golpiza a Rodney King que fue filmada por un testigo y transmitida en todo el mundo.
Anteriormente, en 1989 la ley fue invocada después del huracán Hugo, cuando tuvo lugar el saqueo generalizado en St. Croix, en las Islas Vírgenes.
Además, la ley fue reformada en el 2006, durante el huracán Katrina, con una ampliación que permite incluir “desastres naturales, epidemias y otras emergencias de salud serias, ataques terroristas e incidentes”.
En esa oportunidad, todos los gobernadores criticaron la reforma al instrumento legal, pues la consideraron como una toma de poder presidencial con el fin de suprimir el poder de los estados y aumentar el papel de los militares en los asuntos internos, según un ensayo publicado por la Facultad de Derecho de la Universidad de Berkeley.
Actualmente en EE.UU., de acuerdo con las autoridades, más de 40 ciudades decretaron toque de queda y más de 15 gobernadores mantienen desplegados a agentes de la Guardia Nacional en los estados.