El primer vicepresidente del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), Diosdado Cabello, reveló el pacto que hicieron la opositora María Corina Machado y el candidato presidencial de la Plataforma Unitaria, Edmundo González Urrutia.
Durante la transmisión de su programa “Con el Mazo Dando”, Cabello leyó una de las informaciones que le dio uno de sus patriotas cooperante, quien le reveló el pacto que hicieron Machado y González.
De acuerdo a la información, María Corina le impuso como condición a Edmundo que la nombrara vicepresidenta, luego que él ganara las elecciones presidenciales del próximo 28 de julio.
Por lo tanto, Machado aceptó alzarle la mano a González solo porque él aseguró que la nombraría como su vicepresidenta y 60 días después de juramentarse le diría al país que renunciaba a su cargo por complicaciones de salud.
Además, el informante le confesó a Diosdado Cabello que el primer elegido para sustituir a Machado ante su inhabilitación fue Eduardo Fernández “El Tigre”. Sin embargo, él se negó a dejar el poder a los 60 días después de que lo juramentaran en el cargo.
“Al Tigre le hicieron tres preguntas: ¿Cuál es el roll de María Corina en el nuevo Gobierno?, ¿designarías a María Corina como vicepresidenta?, ¿renunciarías 60 días después de la toma de posesión para que María Corina asuma el poder? Hermano, el Tigre respondió negativo y por supuesto no lo eligieron”, leyó el también parlamentario.
Por otra parte, el patriota cooperante indicó que últimamente María Corina está muy alterada luego de que el acto en Tucupita fuera un fracaso.
Machado está preocupada por el dron de seguridad que vuela sobre sus actos de calle porque deja en evidencia la poca convocatoria que tiene. Por esto, ahora ella exige que le paguen a la gente para que asista a las concentraciones y así mejorar la puesta en escena.
Vale recordar, que el pasado 23 de mayo Diosdado Cabello alertó que el candidato presidencial de la oposición, Edmundo González, es parte de un plan perverso contra el país.
Cabello lo calificó como un títere al que tienen que darle cuerda por detrás, porque no tiene personalidad ni criterio.