Miles de asistentes al Festival Burning Man quedan afectados por tormenta en el desierto de Nevada, los accesos a la locación están bloqueados y el aeropuerto está cerrado. Deberán administrar bien agua y comida porque aún no se sabe cuándo levantarán el Estado de Emergencia. Hasta ahora solo contabilizaron una persona fallecida en el lugar.
Desde 1986, cada año se celebra en el desierto de Nevada, EE.UU. un festival de entretenimiento versátil que dura 3 días, reconocido por la quema de figuras de tamaño gigante. Se escogió esta locación de Black Rock City precisamente por estar apartada y evitar posibles desastres. Sin embargo, cada año prácticamente se construye una ciudad completa para albergar a los más de 60 mil asistentes que acampan en carpas o trailers.
Este año la tormenta les aguó literalmente la fiesta, ya que debido a las cuantiosas lluvias que cayeron, suspendieron el evento y decretaron Estado de Emergencia. De hecho, el gobierno local ha indicado que en caso de que la situación empeore, tendrán que interceder los cuerpos militares y de protección civil.
Según los reportes y pronósticos climatológicos indican que la tormenta se quedará hasta el domingo. Por lo que la gente que se quedo varada en la región tendrá que resistir al menos 36 horas más en condiciones marcadas por el frío, la humedad, el lodo y las limitantes en recursos y servicios.
Una muerte
Una persona murió en el festival, confirmó la Oficina del Sheriff del condado de Pershing en un comunicado el domingo por la mañana.
“La Oficina del Sheriff del Condado de Pershing está investigando actualmente una muerte que ocurrió durante esta lluvia. La familia ha sido notificada y la muerte está bajo investigación. Como esta muerte aún está bajo investigación, no hay más información disponible en este momento”, según a la declaración de la oficina del sheriff citada por ABC News.
La noticia de la muerte llegó un día después de que los organizadores emitieran un comunicado alarmante a los asistentes al festival.