Una publicación reciente en redes sociales, sor parte del ex enviado espacial de Donald Trump para Venezuela, Elliott Abrams, supone una nueva forma de chantaje o tal vez esconde la posición de un funcionario de la antigua gestión de la Casa Blanca, acerca de la feroz campaña de sanciones y bloqueo contra la nación suramericana.
El artículo escrito por Abrams, fue divulgado en Twitter por el corresponsal de la agencia Associatted Press (AP), para América Latina, Joshua Goodman. El periodista menciona que “el ex zar de Venezuela», Elliott Abrams, propone levantar la sanción de Trump que prohíbe a Maduro intercambiar exportaciones de crudo por combustible diésel. Con la condición de que permita el Programa Mundial de Alimentos (WFP, por su sigla en inglés).
En ese sentido, el texto publicado por Elliott Abrams en un blog admite, en medio del discurso imperialista y antivenezolano, que sobre el país pesan “amplias sanciones económicas” contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro, las cuales afecta especialmente al sector petrolero.
Al respecto, el ex enviado de Washington recuerda que “la administración Trump prohibió los canjes de petróleo crudo venezolano por gasolina y diésel”. Es en este punto, en el cual Abrams introduce la supuesta propuesta para el “levantamiento” de sanciones, pero que más bien pareciera apuntar en otra dirección.
El empeño de Elliott Abrams
El artículo de opinión del exfuncionario trumpista se refiere a los supuestos esfuerzos que existen para negociar la entrada del Programa Mundial de Alimentos a Venezuela. Sobre este tema, los centros de poder en Estados Unidos y Europa acusan al gobierno venezolano de bloquear el ingreso de “ayuda humanitaria”.
“La administración de Biden debería condicionar el intercambio de diesel al permiso para que el PMA trabaje en Venezuela. Es lógico: si los intercambios de diésel están destinados a ayudar a la situación alimentaria. Entonces exijamos que el régimen permita una ayuda seria y directa a los venezolanos que la necesitan”, propone Abrams.
Sin embargo, el Gobierno Bolivariano ha dejado claro que no existe ningún impedimento impuesto al Programa de Alimentos de la ONU; con lo cual denunció en reiteradas ocasiones la generación de “fake news” en contra de Venezuela en ese sentido.
Por esta razón, en diciembre de 2020, el propio canciller Jorge Arreaza, fijó posición acerca de los señalamientos y calificó la versión que hoy rescata Elliott Abrams, como “mentiras fabricadas” por agencias de prensa y opinadores.
Fábrica de mentiras contra Venezuela
El ministro Arreaza dejó claro, en ese entonces, que el gobierno del presidente Nicolás Maduro aspira alcanzar un acuerdo con el programa del organismo multilateral; siempre bajo el respeto de los principios y leyes de la nación. Cabe destacar que Venezuela mantiene una plataforma de distribución de alimentos.
Hoy, el planteamiento de Abrams levanta nuevas calumnias al afirmar que el gobierno venezolano “utiliza el acceso a los alimentos como arma de control social y político. Por ejemplo, exigiendo a los ciudadanos que buscan alimentos que muestren su carnet de miembro del partido gobernante para obtenerlos”.
El mismo Abrams, quien hoy propone a Joe Biden chantajear a Venezuela con el envío de alimento; a cambio de dejarles intercambiar crudo por diésel, amenazó el septiembre del año pasado con medidas más duras por parte de Trump.
“Creemos que nuestras sanciones han sido extremadamente eficaces en reducir los ingresos del régimen, pero creemos que podemos hacerlas más eficientes. Entonces vamos a hacer algunas cosas para endurecerlas en un futuro próximo”, declaró Elliott Abrams por aquellos días.