La motosierra del presidente argentino, Javier Milei, sigue implacable y así lo demostró este viernes al firmar el veto a la reforma jubilatoria, que ya había aprobado el Senado la semana pasada y mejoraría las pensiones.
Ignorando las multiples manifestaciones de los jubilados, el mandatario argentino cumplió su advertencia y firmó el veto a la reforma jubilatoria.
El proyecto, ahora vetado por Milei, establecía una fórmula de actualización mensual de las jubilaciones que combinaba el índice de inflación y la variación promedio de los salarios formales, más un ajuste extraordinario del 8,1%.
La firma se llevó a cabo un poco después de una reunión que el presidente sostuvo con parlamentarios del oficialismo y de la oposición.
Se espera que el lunes se publique el decreto en el Boletín Oficial.
Según Javier Milei la ley es una irresponsabilidad que condenaría a los argentinos.
Asimismo, añadió que la Ley implicaría un gasto adicional de 1,2 % del PIB, y obligaría al Estado a contraer una deuda.
«Hay que entender el trasfondo de todo esto, que es el intento de romper el equilibrio fiscal y la gravedad de todo esto, cuando proponen un gasto sin su contrapartida de recursos. No hay otra razón para hacer esto que no sea romper con el equilibrio de las cuentas públicas», alegó el pasado lunes el vocero presidencial, Manuel Adorni.
Las jubilaciones han sido una de las asignaciones más afectadas por el plan de ajuste del Ejecutivo de Milei puesto en marcha desde que asumió el 10 de diciembre pasado.
Si bien, en marzo el mandatario actualizó por decreto las pensiones, basándose en la inflación, no lo hizo mediante una fórmula que regía desde 2021.
Pero la decisión no fue una sorpresa, ya que la semana pasada Milei ya había adelantado en una entrevista que vetaría la reforma.
Tras la advertencia de Javier Milei, la semana pasada unos 2.500 jubilados marcharon desde el Congreso hacia la Casa Rosada para exigir al presidente que no vetara la ley.
Sin embargo, la respuesta del Gobierno fue un fuerte enfrentamiento, en el que la policía utilizó gas pimienta y golpeó a algunos jubilados con garrotes.
Aunque la Constitución de Argentina habilita al presidente a vetar total o parcialmente una ley, el Parlamento puede superar esto volviendo a someter a votación el proyecto y obteniendo el voto afirmativo de al menos dos tercios de ambas cámaras legislativas.