La Suprema Corte de EE.UU. ratificó este jueves la exclusión de los puertorriqueños de los beneficios de seguridad social. En una votación de 8 a 1 se rectificó la negativa al programa Ingreso Suplementario de Seguridad (SSI por su sigla en inglés); el cual buscaba beneficiar a adultos mayores y discapacitados, alegando que su exclusión no constituye ningún tipo de discriminación inconstitucional.
El único voto a favor fue de la jueza Sonia Sotomayor, hija de puertorriqueños, quien se dio a la tarea de diseñar y presentar la propuesta ante la corte.
Sotomayor: Desde mi punto de vista, no existe un fundamento racional para que el Congreso trate a ciudadanos necesitados que viven en cualquier parte de Estados Unidos de manera tan distinta que a otros. Sostener lo contrario, como hace la Corte, es irracional y antitético a la naturaleza misma del programa SSI y la igualdad de protección de los ciudadanos garantizada por la Constitución.
Por su parte, el El juez Brett Kavanaugh, quien escribió la sentencia, coincidió con la administración Biden defendiendo la exclusión de los puertorriqueños. Alegando que “así como no todos los impuestos federales se extienden a los residentes de Puerto Rico; no todos los beneficios sociales federales se extienden a los residentes de Puerto Rico”.
Sin Sorpresas
La decisión de la corte no sorprende a los analistas y mucho menos a los activistas de DDHH de Puerto Rico; isla que se encuentra bajo la dominación colonial estadounidense la guerra con España en 1898. Momento en el que sus residentes pasaron a ser ciudadanos de Estados Unidos en segunda categoría, sin derecho a voto en las elecciones presidenciales, sin representación en el Congreso y ahora sin garantías mínimas de derechos sociales.
Hasta la fecha se conocen casos en los que el gobierno estadounidense demanda la devolución de las ayudas económicas otorgadas; colocando en jaque a los ciudadanos más vulnerables.