El Consejo Nacional Electoral (CNE), reconoció a los candidatos, Guillermo Lasso y Yaku Pérez, por su “disposición hacia la búsqueda de opciones adecuadas, en irrestricto respeto al Estado de Derecho y los objetivos democráticos de la nación ecuatoriana”, luego de sostener una reunión con ambos candidatos “a puerta cerrada”.
Al culminar la reunión, el CNE publicó los acuerdos de diálogo suscritos por el ente rector, junto a la Organización de Estados Americanos, Lasso y Pérez. Entre ellos está la revisión del 100% de la votación de Guayas, incluidas las actas con novedades. Asimismo, indican que revisarán el 50% de las votaciones en 16 provincias.
De igual forma, los acuerdos suscriben que se elaborará un instructivo para operativización del acuerdo y la veeduría ciudadana al sistema informático con delegados de las partes (sin incluir al ganador, Andrés Arauz).
Al terminar el proceso, el CNE afirma que se hará la proclamación definitiva de los resultados, transmitiéndolos en canales oficiales del ente de forma continua.
Estos “acuerdos” han generado controversia en los usuarios, algunos se preguntan, ¿Dónde está la democracia?, ¿en qué tiempo estiman se conocerán los resultados definitivo?. Además califican al ente como ineficiente, corrupto e imparcial.
Vinculan a Arauz con el ELN
El fiscal general de Colombia, Francisco Barbosa, llegó a Ecuador en horas de la tarde a reunirse con la Fiscal General de ese país, Diana Salazar. En dicha reunión se espera que entregue las supuestas pruebas que vinculan al candidato ganador de la primera vuelta, Andrés Arauz, con el ELN.
El alto funcionario colombiano llegó a suelo ecuatoriano “invitado” por la fiscalía. Supuestamente para hacer entrega de una presunta información hallada en los archivos de Andrés Felipe Vanegas Londoño, alías ‘Uriel’. Este fue asesinado por las fuerzas armadas colombianas; era el tercero al mando del Frente de Guerra Occidental del ELN.
Varios indicadores apuntan a que esta es una nueva estrategia del régimen de Lenin Moreno para detener el triunfo del candidato progresista, Andrés Arauz. Mientras, “a puerta cerrada” definen los destinos de la democracia en Ecuador; la OEA, CNE; Yaku y Lasso acordaron un “reconteo de votos”, sin la participación del candidato ganador.
Algunos analistas plantean que esta nueva “artimaña” podría impedir que la segunda vuelta no se realice el 11 de abril del 2021 y le permitiría a la derecha ganar tiempo. Por ejemplo la fiscalía ecuatoriana, experta en montar expedientes en tiempo récord, podría impedir la participación de Arauz en segunda vuelta, aun cuando es el más votado. Esta maniobra preocupante abre la puerta a un hipotético escenario en el que se enfrentarían Yaku y Lasso, violando la voluntad soberana expresada en urnas.