En el marco de la campaña para las elecciones presidenciales en EE.UU., Donald Trump firmó 4 órdenes ejecutivas que tienen como objetivo reducir los precios de medicamentos recetados.

Estas órdenes permitirán reducir el costo de la insulina y los epipens (autoinyectores de epinefrina), así como facilitar la compra de medicinas en el extranjero y reducir pago a intermediarios.

Este anuncio no ha sido bien recibido por las farmaceúticas pues han solicitado una reunión con Trump para tratar este tema.

A raíz de estas reacciones, Donald Trump declaró: «Es posible que no necesitemos implementar la cuarta orden ejecutiva, que es una orden muy difícil para las compañías farmacéuticas. Veremos lo que tienen que decir el martes, tal vez tengan una buena idea, pero debe ser muy importante».

Según algunos medios, estas acciones podrían ser favorables para las venideras elecciones presidenciales. Helena Villar, corresponsal de RT, se refiere a esta información a través de sus redes sociales:

Trump ha sido altamente cuestionado sobre su gestión en el ámbito de la salud. Esto a partir de su ineficaz gestión en la pandemia de coronavirus que ha llevado a que este país sea epicentro de la misma a escala mundial, evidenciando un sistema de salud totalmente ineficiente. Más allá de esto, la economía de este país junto a los índices de desempleo marcan para EE.UU. un horizonte de miseria para las mayorías.

Por otra parte, las grandes protestas en todo el país a causa de la sistemática violencia racista e institucional, generan para este magnate un escenario de decadencia para las futuras elecciones. En este contexto, ¿están utilizando la salud como conejillo de indias para la victoria presidencial de Donald Trump?. ¿Sobre todo ahora que no ha resultado favorecido en las últimas encuestas?.