El Día de los mártires en Venezuela es conmemorado cada 21 de junio debido a que en 1966 Fabricio Ojeda fue asesinado por manos de la fuerza de inteligencia militar del gobierno genocida de Raúl Leoni luego de ser capturado y puesto en los calabozos. Su muerte fue declarada como «suicidio» pero todas las versiones confirman que fue un hecho simulado y que efectivamente Fabricio Ojeda fue torturado y asesinado.
El militante
El comandante Fabricio Ojeda nació el 6 de febrero de 1929, en Boconó, estado Trujillo. Con apenas a los 17 años comenzó su carrera política y en 1949 se inscribe en el Partido Unión Republicana Democrática (URD), donde militó hasta 1962, fecha en que renunció públicamente.
«Colegas diputados, que vengo ante ustedes a expresar la decisión de dejar el Parlamento –este recinto que pisé por voluntad del glorioso pueblo caraqueño, hoy oprimido y humillado–, para subir a las montañas e incorporarme a los compañeros que ya han iniciado el combate y con ellos continuar la lucha revolucionaria para la liberación de Venezuela, para el bienestar futuro del pueblo, para la redención de los humildes». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.
Presidente de la junta patriótica
En el marco de la cuenta dictadura de Pérez Jiménez, Fabricio Ojeda fue presidente la Junta Patriótica que encabezó los esfuerzos desde dentro de Venezuela para derrocar a la dictadura hecho que ocurrió el 23 de enero de 1958 cuando es derrocada.
«Estoy consciente de lo que esta decisión implica, de los riesgos, peligros y sacrificios que ella conlleva; pero no otro puede ser el camino de un revolucionario verdadero». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.
Periodista por la verdad
La Universidad Central de Venezuela (UCV) fue la casa de estudios donde en 1955 comenzó su carrera de periodista donde apenas un año después en 1956 comenzó a trabajar en El Nacional, donde cubrió la fuente presidencial. Luego trabajó en La Calle y El Heraldo.
«Necesitamos un cambio a fondo para liberar al trabajador de la miseria, la ignorancia y la explotación; para poner la enseñanza, la técnica y la ciencia al alcance del pueblo: para que el obrero tenga trabajo permanente y sus hijos amparo y protección». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.
La traición
Fabricio Ojeda fue uno de los protagonistas de la gesta libertaria que terminaría derrocando a la dictadura en 1958, encabezó a las fuerzas revolucionarias en las calles de Caracas y encabezó la movilización civil a nivel nacional. Por su parte, Rómulo Betancourt, Jovito Villalva y Rafael Caldera se encontraban en el extranjero «apoyando» y al caer la dictadura vuelven y firman el llamado «Pacto de Punto Fijo», sacando al Partido Comunista de Venezuela y dejando de lado al presidente, hasta ese momento, de la Junta Patriótica, Fabricio Ojeda.
«Esta situación precisa una transformación estructural que cambie el sistema formalista de la democracia por la efectiva realización de la misma: es decir, que arrase con todo lo podrido, con todo lo injusto, con todo lo indigno de nuestra sociedad y en su lugar erija una nueva vida de justicia y libertades». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.
La renuncia
Luego de la caída de Marcos Pérez Jiménez, Fabricio Ojeda fue elegido diputado ante el nuevo Congreso Nacional donde estuvo defendiendo los intereses de las mayorías hasta 1962 cuando renunció y se unió a la lucha armada por la verdadera liberación de Venezuela.
«Mientras unos lo tienen todo, comodidades, lujos, placeres y bonanza; otros nada poseen, ni nada les espera, a no ser la muerte en la mas completa pobreza». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.
Condenado
Ojeda era considerado por el gobierno de Raúl Leoni, como el comandante de todas las fuerzas guerrilleras del país, por lo que el 12 de octubre de 1962 fue apresado y condenado a 18 años de prisión, pagando condena en la cárcel de Trujillo desde donde logra escapar el 15 de septiembre de 1963. Ese mismo año es designado Comandante del frente José Antonio Páez y presidente del Frente de Liberación Nacional (FLN).
«Mientras unos viven como parásitos, sin trabajar ni producir, otros no encuentran donde colocar su fuerza de trabajo. Mientras unos ven a sus mujeres dar a luz en clínicas lujosas, otros, los más, tienen que conformarse con verlas parir como animales en sus ranchos inmundos». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.
La captura de la muerte
Tres años después, el 17 de junio de 1966 fue capturado en La Guaira y el 21 de junio, fue asesinado y se declaró «suicidio». Familiares y ex combatientes han defendido la verdad por años, Fabricio fue asesinado en los calabozos de inteligencia militar.
«Esta es nuestra decisión, este nuestro camino. Vamos a las armas con fe, con alegría, como quien va al reencuentro de la Patria preferida. Sabemos que con nosotros está el pueblo, el mismo que en todas las épocas memorables ha dicho presente ante todo lo noble, ante todo lo bueno, ante todo lo justo». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.
Por la verdad
El 16 de noviembre del 2012 fueron exhumados sus restos enterrados en el Cementerio General del Sur, en presencia de los familiares de los familiares de Ojeda, el diputado del PSUV Freddy Bernal, junto con diez expertos de la Unidad Criminalística contra la Vulneración de los Derechos Fundamentales y cuatro fiscales del Ministerio Público. Posteriormente y por orden del presidente Nicolás Maduro, desde 2017, sus restos reposan en el Panteón Nacional.
«Convoque, pues señor presidente, al suplente respectivo porque yo he salido a cumplir el juramento que hice ante ustedes de defender la Constitución y las leyes del país. Si muero no importa, otros vendrán detrás que recogerán nuestro fusil y nuestra bandera para continuar con dignidad lo que es ideal y saber de nuestro pueblo. ¡Abajo las cadenas! ¡Muera la opresión! ¡Por la Patria y por el Pueblo! ¡Viva la Revolución!». Fragmento de la carta renuncia como diputado, 30 de junio de 1962. Fabricio Ojeda.