¡David Nieves, hasta la victoria siempre! | Por: Alí Rojas Olaya
Ahora sé, David, que te has encontrado con mi padre, con Eduardo Sanoja, con Carmelo Laborit, lo sé en mi conciencia estremecida de tantos recuerdos. Viva está en mi memoria la alegría de aquellas elecciones del 3 de diciembre de 1978, no por los triunfos yanquis de adecos y copeyanos, sino por la curul que ganaste con la Liga Socialista que te garantizaba inmunidad parlamentaria.
Las torturas que te aplicaron los esbirros Arístides Lander, Director de la Disip; Octavio Lepage, Ministro de Relaciones Interiores, y Carlos Andrés Pérez, presidente de Venezuela, nunca pudieron borrar de tu faz la sonrisa, ni de tu corazón tanta ternura, ni de tu espíritu tanto humor caribe.
Cuando te sumaste a la guerrilla para combatir a los exterminadores de futuro, te convertiste en un imprescindible. Y así tenía que ser porque te dolía en el alma tantos Panchitos Mandefuá y tanta ausencia de angelitos negros.
Eres parte del cordón umbilical que alimenta la esperanza del pueblo desde aquel fatídico 1492, el mismo del negro Miguel de Buría, de la Reina Negra de Macanao, de Apacuana, de Guillermo Ribas y Miguel Gerónimo Guacamaya dell Cumbe de Taguaza, de los comuneros andinos de 1781, de José Leonardo Chirino en Coro, de Simón Rodríguez, Manuel Gual, José María España, Isabel Gómez y Joaquina Sánchez en la insurrección de La Guaira, de Francisco de Miranda, de Jean Baptist Bideau en Güiria, del Libertador del Mediodía de América, de Antonio José de Sucre, de Josefa Camejo, de Juana Ramírez “La Avanzadora”, de Manuel Piar, de Rafael Urdaneta, de Ezequiel Zamora, de Cipriano Castro, de Maisanta, de Argimiro Gabaldón, Fabricio Ojeda, Juan Vicente Cabeza, Juan Carlos Parisca, Hugo Trejo, Manuel Ponte Rodríguez, Hugo Chávez, Kléber Ramírez Rojas, Alexis González Revette y Nicolás Maduro.
Tus armas seguirán siendo las Sociedades Americanas, la Defensa de Bolívar y el Discurso de Angostura, los relámpagos de soles, las ideas acrisoladas en la utopía posible y la alegría que se germina en los latidos de la emancipación. ¡Honor y gloria para David Nieves!
ALÍ RAMÓN ROJAS OLAYA
@rojasolaya
