El presidente de la República, Nicolás Maduro marcó el tono, sin rodeos: Venezuela se opone firmemente a la guerra entre Irán y el “estado sionista, asesino, genocida, racista, fascista y criminal de Israel”. Su declaración, resonando con la claridad de un gallo al amanecer, dejó absolutamente explícita la posición de la nación bolivariana.
“¡No a la guerra, decimos mil veces desde Venezuela, no war, no war!”, clamó el presidente Maduro durante el Taller de las 7T para la Acción Transformadora, dirigiéndose a diputados y diputadas. Hizo un llamado vehemente al noble pueblo estadounidense para evitar que su Gobierno se involucre en el conflicto contra Irán. Enfatizó que únicamente el pueblo tiene el poder de frenar la locura de una intervención bélica. “Solo el pueblo puede derrotar la locura de que se involucren en la guerra; es un llamado que hacemos desde la Venezuela pacifista”, afirmó.
El presidente Maduro no dudó en confrontar la posibilidad de una escalada global. «¿Quieren ustedes otra guerra, quieren que se involucre Estados Unidos en la matanza, en la sangre y la destrucción de los pueblos musulmanes, de los pueblos de Irán, de los pueblos árabes y que quede marcado EE.UU. como el iniciador de una Guerra Mundial, la tercera?», inquirió, subrayando que solo los ciudadanos estadounidenses pueden detener tal desastre.
No a la guerra
Asimismo, instó a alzar una sola voz en cada rincón del país y gritar “no a la guerra”. Además, el presidente Maduro convocó a las potencias regionales y mundiales a sentarse a la mesa de negociaciones y forzar al Estado sionista de Israel y a Benjamín Netanyahu a cesar sus ataques y respetar el derecho internacional. De igual forma, pidió al pueblo judío detener la locura bélica desatada por Netanyahu, cuyo objetivo parece ser colonizar todo el Medio Oriente y Asia Occidental.
El presidente venezolano también denunció las intenciones de Israel de destruir a los 90 millones de personas que habitan la República Islámica de Irán, un país con una vasta y milenaria cultura que merece respeto. Exhortó al gobierno de EE.UU. a frenar la tendencia belicista que buscan imponer para involucrar a su nación en un conflicto armado.
Maduro también recalcó que esta guerra contra los pueblos de Palestina, Irak, Yemen e Irán constituye una guerra imperialista diseñada para destruir pueblos e imponer un dominio militar colonial. El objetivo, según el presidente, es establecer un modelo colonial de orden y obediencia donde «lanzan un grito de orden en Washington y el mundo tiene que obedecer».
Sin embargo, el presidente Maduro sentenció que «eso se acabó, ese mundo se fue y quedó atrás, ha nacido un nuevo mundo«.
Superioridad militar
Por otra parte, reconoció el alto costo humano de la guerra y destacó la evidente superioridad militar de Irán sobre el estado sionista. «Es evidente cómo el pueblo de Irán, con un estado milenario, un estado que tiene 3 mil años, ha demostrado la superioridad militar, pero Irán no quiere la guerra y el mundo no quiere la guerra y nosotros no queremos la guerra, por eso nuestro llamado es a la paz y la conciliación», concluyó. La postura de Venezuela es clara: la diplomacia y la paz deben prevalecer.
“¿Acaso Berlín, París, Londres y Washington buscan una guerra nuclear? Hago un llamado a todos los gobiernos de las nuevas potencias: China, Rusia, Turquía, los países del Consejo del Golfo. Así como a las naciones del Sur Global, pero en especial a los países musulmanes, para que apoyemos y acompañemos a la República Islámica de Irán en su lucha por la paz, deben sentarse y obligar al estado sionista de Israel, a Netanyahu, a respetar al pueblo iraní, a su derecho a la paz. ¡Basta ya de guerras en el mundo y de la locura de Netanyahu contra los pueblos árabes y musulmanes!”, sentenció el mandatario nacional.
