Por: Oscar Bravo
Cada vez más el llamado “rey tiempo” sigue demostrando de que algo está pasando con las actitudes y las acciones de una parte de la dirigencia política opositora que día a día se ve alejada de una irrefutable y sólida ética política, por el uso de supuestos “discursos moralizantes” que no son coherentes con la vida de lujos y ostentación de los parlamentarios de la derecha nacional, que insisten en “publicitarse ante el mundo” de que son los políticos más honestos y preparados del planeta tierra.
Dicen que son una especie de élites anti corrupción, de que solo ellos forman parte de “los políticos decentes”…y al contrario de las y los demás -que son la chusma o políticos de bajo nivel y sobre esas personas es que debería de recaer siempre la sospecha de ser la jauría de políticos corruptos, que priorizan: “hay que aprovechar el poder para vivir bien”…“hay que disfrutar de las oportunidades”…“el poder es efímero y relativo, así que a gozar hoy porque mañana no sabes”…
La fuerza de la realidad y el tiempo lo que ha hecho es corroborar lo que la gente cree, cuando se pregunta si las y los diputados que no cobran sus salarios y otros beneficios, desde hace más de tres años que están en desacato: ¿De qué viven? ¿Quién los financia y bajo qué objetivos los mantienen? ¿Quién les paga los viajes, estadías, ropa, comida y otros gastos? Como olvidar la rumba loca en Cúcuta de un diputado y su asistente (el cual murió), ingiriendo de manera desaforada bebidas costosas y con muchos dólares en las manos.
Todo viene por el nuevo escándalo político, que ha generado la presencia en los estadios de beisbol de las grandes ligas de dos diputados de la derecha, que se fueron a EEUU a ver juegos de la postemporada (entre nacionales y cardenales). Una entrada en tribuna preferencial cuesta alrededor de 10 mil dólares, y a eso hay que sumarle hotel, comidas, bebidas, pasaje aéreo ida y vuelta.
¿De dónde sale el dinero? Además, cómo se explica que sean solidarios con el bloqueo (antipatriotas) y desean la suspensión de la próxima temporada del beisbol profesional en Venezuela, pero en paralelo apoyan al beisbol estadounidense (pro imperialistas).