China alertó este miércoles a la OTAN de una «respuesta decidida» ante «cualquier acción» de la Alianza que «ponga en peligro» sus «derechos e intereses legítimos», después de que los líderes de la organización militar dijeran que las políticas «coercitivas» de Beijing suponen un desafío.
«Nos oponemos firmemente al movimiento al este de la OTAN hacia la región de Asia y el Pacífico; así como a cualquier acción que ponga en peligro nuestros derechos e intereses legítimos. Ante cualquier amenaza China se enfrentará con una respuesta decidida», señalaron las autoridades a través de un comunicado.
Además, China aseguró que la declaración aprobada por los líderes de la OTAN en la cumbre que se está celebrando en Vilna «está llena de una retórica repetitiva que se hace eco de la mentalidad de la Guerra Fría»; pero a su vez contiene «un sesgo ideológico».
Confrontación e hipocresía
La Embajada de China también afirmó que la Alianza Atlántica «como bloque militar, ha estado haciendo acusaciones infundadas e inmiscuyéndose en asuntos más allá de sus fronteras y creando confrontación»; lo que «expone completamente la hipocresía de la OTAN y su ambición de buscar expansión y hegemonía».
En este sentido, las autoridades chinas agregaron: «Declarándose reiteradamente en el comunicado como nuclear, la OTAN solo exacerba las tensiones regionales. Lo que preocupa profundamente a China».
Cabe destacar que los líderes de la OTAN aprobaron este martes una declaración en la que aseguraron que «las ambiciones declaradas y las políticas coercitivas de China desafían nuestros intereses, seguridad y valores».
Al tiempo que destacaron que «las operaciones híbridas y cibernéticas maliciosas de China; así como su retórica de confrontación y desinformación tienen como objetivo a los aliados y dañan la seguridad de la Alianza».
China no es un adversario
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, afirmó que: «China no es nuestro adversario». Los aliados deben «continuar» comprometiéndose con Beijing.
La declaración de la OTAN subrayó que la profundización de la asociación estratégica entre China y Rusia, y «sus intentos de socavar el orden internacional basado en normas, son contrarios a los valores e intereses de la Alianza».
Por lo que instaron a Beijing a desempeñar un «papel constructivo» como miembro permanente del Consejo de Seguridad de la ONU. Así como condenar la guerra de agresión de Rusia contra Ucrania o a abstenerse de apoyar de cualquier modo el esfuerzo bélico ruso.
A este respecto, China pidió a la OTAN a «seguir la tendencia de los tiempos, a escuchar el justo llamamiento de la comunidad internacional a la paz, el desarrollo y la cooperación. Además, a corregir sus percepciones y políticas erróneas y desempeñar un papel constructivo en la paz y la estabilidad mundial».
Agencias