Mientras el gobierno de Chile exige cooperación por parte de Bolivia, para frenar la ola de migrantes ilegal por la frontera entre ambos países, el presidente boliviano, Luis Arce, ratificó su postura de abogar por la salida al mar de su nación.
“Estamos dispuestos a realizar esfuerzos para lograr que nuestras fronteras se tornen cada vez más de vida y de cultura y no así de delitos”; dijo Arce.
Luis Arce refirió que producto de la Guerra del Pacífico, que estuvo intereses imperialistas, se privó a Bolivia de su salida al Mar. A su vez, señaló que esta acción le ha costado a su nación la posibilidad de crecer el 1 por ciento del PIB.
“Estamos seguros que algún momento, como ocurrió durante el gobierno socialista del compañero Salvador Allende, será posible viabilizar las justas, legítimas e históricas aspiraciones de un pueblo que nació con costas marítimas”; indicó el mandatario boliviano.
Por su parte, Chile mantiene su posición histórica, y asegura de a partir del acuerdo de paz, suscrito por ambas naciones hace 20 años, las limitaciones fronterizas marítimas ya están establecidas, por lo que no existe ninguna disputa.
Días atrás, el presidente de Chile informó que se reuniría con representantes de países vecinos para tratar el tema de la migración ilegal. Asimismo, denunció que su homólogo Luis Arce de no hacer nada para impedir el flujo de migrantes hacia la frontera con Chile.
En este sentido, el presidente Luis Arce, negó que existiera un acuerdo bilateral con Chile, con respecto a la migración ilegal.