Investigadores estadounidenses dieron a conocer esta semana que en 2019 se detectó en Bolivia un pequeño de brote de una extraña enfermedad que se parece al Ébola. Esta afección se le conoce como “Chapare”, el mismo nombre de la localidad en donde fueron detectados los primeros casos.
Según los especialistas norteamericanos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades, esta enfermedad no es una novedad del año pasado; ya que el primer contagio se conoció en 2004.
Lo que se conocía desde entonces es que el “Chapare” se contagiaba luego de tener contacto con la orina o excremento de ratas típicas de la zona. Pero lo relevante del brote en 2019 es que por primera vez se comprobó que también puede propagarse de “persona a persona”.
Enfermedad muy mortal
De acuerdo al pequeño brote de 2019, 5 personas se contagiaron del Chapare y 3 murieron; lo que revela al alto potencial de mortalidad de esta enfermedad.
Los medios internacionales que reseñan esta información describen que el primer contagio del año pasado fue un agricultor de 65 años; quien a su vez contagió a dos médicos que le atendieron. Todos ellos fueron las víctimas fatales de esta peligroso arenavirus.
Pero antes de que cunda el pánico por una posible propagación más grande, los investigadores señalaron que esta enfermedad es vulnerable al calor y los desinfectantes “por lo que se cree que una propagación global es poco probable”.
Los síntomas del Chapare
Entre los síntomas de esta enfermedad especialmente fatal y muy similar al Ébola destacan “fiebre, dolor de cabeza, malestar en los abdominales; sarpullido, insuficiencia orgánica y hemorragias, potencialmente mortales”.
Sobre la especie de ratón que propaga esta enfermedad, se sabe que es una “rata de arroz pigmea” que habita en Bolivia y en otros países de la región.
