En EE.UU. las cosas no son como en las películas que todo es color de rosas, al presidente Joe Biden se le está cerrando su radio de acción y ahora tendrá al estado de Texas en contra.
Recientemente en esta localidad las autoridades colocaron alambre de púas justo en la frontera con México, como otra medida para contener inmigrantes ilegales. Acto seguido, el mandatario estadounidense ordenó retirarlos por considerarlos extremos y peligrosos.
Sin embargo, Texas no obedeció el mandato de Biden, refutando en manos del gobernador de este estado, el republicano Greg Abbott y aunque la Corte Suprema respaldó al gobierno federal, Abbott se niega a cumplir el mandato presidencial y no permite el ingreso de fuerzas federales, lo que generaría un posible enfrentamiento entre la Guardia Nacional de Texas y las tropas federales.
Guapo y apoyado
Como parte de esta escena, y ante la posición intransigente del gobernador de Texas, se le sumaron en apoyo a su postura, 25 de 26 de sus homólogos republicanos en su disputa con la Administración del presidente Biden. Además, apareció para darle un gran espaldarazo el expresidente de ese país, Donald Trump.
En una declaración conjunta, los gobernadores republicanos afirman que el presidente Biden y su gobierno “han dejado a los estadounidenses y a nuestro país completamente vulnerables a una inmigración ilegal sin precedentes que cruza la frontera sur”. “En lugar de defender el estado de derecho y asegurar la frontera, la Administración Biden ha atacado y demandado a Texas por dar un paso al frente para proteger a los ciudadanos estadounidenses de niveles históricos de inmigrantes ilegales, drogas mortales como el fentanilo y terroristas que ingresan a nuestro país”, agregan.
De hecho, el vicegobernador de Texas, Den Patrick, aseguró este viernes que sería una gran equivocación si la Administración del presidente Joe Biden desencadenara un conflicto violento entre las fuerzas del orden estatales y el Gobierno federal de EE.UU.
“El mayor error que podría cometer la Administración Biden sería confrontar a las fuerzas del orden o a nuestro Ejército o nuestra Guardia Nacional en nuestra frontera”.
Por último, Patrick recalcó que Texas continúa sus esfuerzos para proteger la frontera, destacando que, al contrario de lo que se cree, la Patrulla Fronteriza trabaja en conjunto con el estado “todos los días”. “Es Joe Biden el que quiere entrar y dividirnos […] Estamos haciendo el trabajo. Están tratando de hacer de esto una pelea. Estamos tratando de proteger nuestra frontera”, insistió.