Luego que la Administración Nacional de Medicamentos, Alimentos y Tecnología Médica (ANMAT) aconsejara un nuevo análisis de seguridad; considerando la cantidad de personas mayores de 60 años expuestos al producto en investigación. El Ministerio de Salud de Argentina autorizó la aplicación de la vacuna Sputnik V contra el covid-19 a los septuagenarios en el país.
ANMAT indicó que se incluyeron 19.866 sujetos que recibieron las dos dosis, y que los efectos secundarios más frecuentes fueron el síndrome pseudogripal y reacciones locales en el sitio de la inyección, «eventos esperados con este tipo de productos«.
«No se reportaron muertes relacionadas a la vacuna» ni tampoco «casos de alergias severas», precisa la institución.
La entidad indica que durante el estudio a Sputnik V, se presentaron «eventos adversos serios«, pero ninguno tuvo relación causal con la vacuna placebo, indican en el informe de ampliación.
Gracias a la investigación se develó que el rango de eficacia del antídoto es de 91,8 % para mayores de 60 años.
«La variable de seguridad mostró un perfil que no difiere del observado en el resto de la población», señaló la institución.
Cargamento de vacunas
Este sábado, llegó a la Argentina el segundo avión con un cargamento de vacunas Sputnik V.
El país suramericano es el décimo segundo más afectado por la pandemia. Este evento es parecido a creer que la cura a la enfermedad les ha venido del cielo.
Como el pasado 25 de diciembre, cuando se hizo el primer viaje a Rusia para buscar las vacunas, esta vez llegaron otras 300 mil dosis, las cuales serían el refuerzo de un tratamiento que es de 2 inyecciones.
De acuerdo a las autoridades argentinas, se han aplicado 200 mil dosis del primer envío.
En los próximos días, el país prevé recibir cinco millones de inyecciones de este fármaco, y para febrero espera otros 14,7 millones, de acuerdo al contrato firmado el 9 de diciembre con el Fondo Ruso de Inversión Directa.