Julia siguió causando estragos este fin de semana por Nicaragua, pese a que este domingo se debilitó y pasó a tormenta tropical después de tocar tierra, provocando lluvias torrenciales e inundaciones.
Por el paso de Julia por Nicaragua unas 13 mil personas fueron evacuadas de sus hogares, así lo informó el director del Sistema Nacional para la Prevención, Mitigación y Atención de Desastres (Sinapred), Guillermo González.
Asimismo, unas 164 mil familias están sin energía eléctrica en todo el país, aunque no se reportaron víctimas humanas por el paso de la tormenta.
Lluvias torrenciales e inundaciones tras el paso del Huracan Julia por Nandaime, Granada, Nicaragua. pic.twitter.com/9iy4e7sIN5
— Alerta Cambio Climático (@AlertaCambio) October 10, 2022
«En todas partes está lloviendo y lo más importante, y por lo que damos gracias infinitas a nuestro Padre Celestial (…) hasta el momento y ojalá se mantenga así, no tenemos fallecidos», confirmó la vicepresidenta de Nicaragua, Rosario Murillo.
El ciclón impactó en la zona de Laguna de Perlas con vientos de 140 kilómetros por hora, que se debilitaron a medida que se desplazaba con rapidez hacia el Pacífico.
🇳🇮 | AHORA: El huracán Julia se hace sentir con fuertes vientos en Nicaragua. pic.twitter.com/jW4pEKeqXm
— Alerta News 24 (@AlertaNews24) October 9, 2022
El domingo, Julia se movía en dirección oeste a 26 km/h (16 mph) y estaba a punto de terminar de cruzar Centroamérica; para avanzar en paralelo a las costas de Honduras, El Salvador y Guatemala sobre el Pacífico.
Este lunes, se prevé que Julia continúe hacia el norte de Centroamérica y el sur de México; donde se mantiene el riesgo de peligrosas lluvias torrenciales hasta el martes.
Ante la llegada de la tormenta, las autoridades de estos países se mantienen en alerta porque existe la posibilidad de inundaciones y aludes.
En El Salvador, el Congreso decretó el sábado por la noche un estado de emergencia nacional por 15 días; y facultó a Protección Civil para realizar evacuaciones obligatorias de poblaciones en riesgo.
En Guatemala, las autoridades comenzaron a informar de las primeras inundaciones y desbordamientos de ríos en la zona fronteriza con Honduras.
Antes de llegar a Nicaragua, Julia pasó al sur de la isla colombiana de San Andrés, donde las autoridades reportaron dos personas lesionadas y daños menores.
