El secretario general de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América (ALBA-TCP), Rander Peña, denunció la existencia de una “maquinaria de extorsión” dentro del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos, contra los migrantes venezolanos.
A través de sus redes sociales, Peña calificó la situación de “inhumana y criminal”, señalando que esta red de “delación y extorsión” hiere profundamente las familias venezolanas.
Además, aseguró que detrás de la red de extorsión están los llamados “coyotes”, liderados por la “derecha venezolana, que ha hecho de la migración un negocio atroz”.
“Ellos venden la información sobre la ubicación de nuestros compatriotas a los agentes migratorios. Si un venezolano se niega a pagar lo que le exigen, lo entregan. Lo delatán. Y luego son enviados directo al Alligator Alcatraz, a Guantánamo o al campo de concentración que hoy opera en El Salvador, donde los esperan el encierro, la incertidumbre y el dolor más cruel”, aseveró Peña.
Asimismo, señaló que la derecha fascista se “lucra del miedo, de la incertidumbre y de la desesperación” de los venezolanos en el exterior. Afirmó que sin duda la oposición venezolana es “cómplice de un sistema que persigue a inocentes y separa niños de sus padres”, calificándolo como un “crimen con rostro político y nombre propio”.
En este sentido, pidió a los líderes de la oposición no negociar con el dolor de los migrantes venezolanos. “El sufrimiento de nuestra gente no es mercancía. Basta de entregar a nuestro pueblo. Con nuestros hijos y nuestro pueblo no se juega”, finalizó.
