La participación del gobierno de Colombia en la incursión terrorista contra Venezuela del pasado 3 de mayo es “de una contundencia y evidencia absoluta”. Así lo calificó el canciller Jorge Arreaza el pasado 11 de mayo en entrevista a la cadena de noticias colombiana Caracol Radio, donde se refirió a la participación del gobierno de Iván Duque en esta operación.
En tal sentido, afirmó que desde el año 2018 se ha informado al gobierno colombiano, e incluso a la Organización de Naciones Unidas (ONU), sobre la existencia de campamentos donde un grupo de ex-militares venezolanos junto a paramilitares colombianos se estaban entrenando para una incursión contra Venezuela.
“Recuerdo yo mismo haber convocado al encargado de negocios en Venezuela y entregar en sus manos la información, las coordenadas de los campos de entrenamiento en Barranquilla así como en la población de Chinacota al Norte de Santander, donde ya estaban entrenándose. Hacia el 23 de febrero del año pasado también denunciamos que Cliver Alcalá con un grupo de ex militares venezolanos, paramilitares colombianos estaban entrenándose en la Alta Guajira con el fin de forzar la supuesta ayuda humanitaria desde EE.UU.”.
En este sentido, destacó que luego de las confesiones de Cliver Alcalá sobre la operación armada con agentes en Colombia entrenándose, no se hizo ninguna investigación en el país vecino. Al contrario, la DEA lo envía a EE.UU. sin esposarlo. Además afirmó que se cuenta con más de 40 testimonios de mercenarios que han sido apresados en los últimos días. Todos afirman, incluyendo a dos estadounidenses y a Jordan Gordeau, que la operación salió desde Colombia.
“Es una ridiculez ya del presidente Duque estar negando esto… es como meter la cabeza debajo de la tierra como un avestruz ante algo que es de una contundencia y una evidencia absoluta”, afirmó Arreaza.
En la misma línea, el ex presidente colombiano Ernesto Samper, también habla sobre la legitimación que ha dado el gobierno de Duque a dicha operación.
El nuevo golpe de estado suicida en Venezuela, que se suma al falso positivo humanitario de Cúcuta y la ingenua toma de Miraflores por Leopoldo López y Guaidó sería parte de una tragicomedia si no los legitimara, el presidente Duque y organismos colombianos de inteligencia.
— Ernesto Samper P. (@ernestosamperp) May 11, 2020