El Carupanazo fue consecuencia de una Venezuela que venía de una de las dictaduras más sanguinarias de la historia, la de Marcos Pérez Jiménez, cuyo poder cesó luego de un alzamiento cívico-militar encabezado por Fabricio Ojeda en las calles y por el adeco Rómulo Betancourt en el «exilio», posterior a la huida del dictador se instauró una junta de gobierno y se elegiría a Rómulo Betancourt como presidente de la República.
Este hecho vino acompañado del llamado «Pacto de Punto Fijo«, que significó una traición a los sectores que verdaderamente luchaban por una democracia. Es así como fue ilegalizado el Partido Comunista (fundamental para la caída de la dictadura) y comenzó la alternabilidad del poder de un bipartidismo constituido por Acción Democrática y Copei.
De modo que durante los primeros años de gobierno de Rómulo Betancourt las desigualdades sociales, los altos niveles de pobreza, la corrupción, la entrega de riquezas a Estados Unidos y el descontento militar. Ello desencadenó, entre otras acciones, dos insurrecciones militares: el Carupanazo y el Porteñazo. Ejecutados en dos fechas distintas:
No son lo mismo
El «Carupanazo» estalló el 4 de mayo de 1962 y el «Porteñazo» el 2 de junio del mismo año. Ambos acontecimientos no tuvieron liderazgo común pero están relacionados estratégicamente, visto que tenían un mismo objetivo: derrocar a Romulo Betancourt.
Carúpano a la cabeza
Era medianoche en Carúpano, estado Sucre, cuando el batallón de Infantería de Marina número 3 y el destacamento número 77 de la Guardia Nacional se levantaron en armas al mando del capitán de corbeta Jesús Teodoro Molina Villegas, del mayor Pedro Vegas Castejón y del teniente Héctor Fleming Mendoza.
Tomaron todo
Los militares y civiles insurrectos ocuparon las calles y edificios de la ciudad, el aeropuerto y la emisora Radio Carúpano. Desde la radio lanzaron un manifiesto a nombre del Movimiento de Recuperación Democrática.
La respuesta de Betancourt
Rómulo Betancourt exigió la rendición a los alzados, al tiempo que iniciaba la movilización de los efectivos del batallón de Infantería Mariño, el batallón Sucre de Cumaná y el batallón de Infantería de Marina Simón Bolívar de Maiquetía. También se produjeron ataques de la Aviación y las unidades navales bloquearon el puerto en lo que se denominó la Operación Tenaza.
La famosa frase
En este hecho fue que Betancourt dio la triste orden de “disparen primero y averigüen después». Ello dejó como consecuencia una masacre sin precedentes en la zona, tras el asesinato de civiles y militares, sin importar si habían participado o no en el alzamiento.
La derrota de los insurrectos
Fueron capturados más de 400 personas involucradas entre militares y civiles, entre ellos el diputado del Partido Comunista Eloy Torres, así como otros miembros de ese partido y del Movimiento de Izquierda Revolucionaria (MIR). Ante tales hechos, Betancourt suspendió las garantías, acusó al PCV y al MIR de estar involucrados en la sublevación y expidió el decreto número 752 que suspendió el funcionamiento de ambas organizaciones políticas en todo el territorio nacional.
